La oposición votó en contra argumentando que la decisión correspondería a la futura Corporación
La ausencia del concejal popular Emilio Carballeda por motivos de salud en el pleno extraordinario en Carballiño permitió aprobar la rebaja del 20% del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para el 2020 con el voto de calidad del alcalde. El gobierno socialista, con siete miembros, aprobó en solitario la propuesta que defendió el regidor, Francisco Fumega, pese al rechazo de los tres grupos de la oposición, que en su totalidad suman nueve ediles pero que solamente contaron con ocho (del PP asistieron cinco; BNG dos y un concejal de Alternativa Veciñal).
La bajada del 20% en el 2020, según apuntó Fumega, es una consecuencia del compromiso adquirido con los ciudadanos. El alcalde había anunciado que se aplicaría una rebaja en este impuesto del 10% en el 2019. Sin embargo, por error, según indicó, no se incluyó el cambio en el expediente de ordenanzas para su aprobación inicial, con lo cual venció el plazo y legalmente ya no puede entrar en vigor el próximo año.
Por ese motivo, y para compensar los casi 275.000 euros que a mayores volverán a pagar los contribuyentes, decide doblar la reducción para el 2020.La oposición de manera
unánime se opone a que se aplique dentro de dos años, basándose fundamentalmente en que habrá una corporación distinta a la que corresponde tomar esa decisión. Al mismo tiempo, el portavoz del PP, Argimiro Marnotes, y el del BNG, Xosé Francisco Ferreiro, manifestaron en sus respectivas intervenciones que no se creían que fuese a consecuencia de un error. "Este grupo de goberno non tiña interés en rebaixar nada. O grupo de goberno minte", matizaba Xosé Francisco Ferreiro. Este edil y Marnotes pusieron sobre la mesa un decreto remitido al Ministerio de Hacienda desde el Concello sobre las líneas fundamentales de los presupuestos del 2019, en el que no se contemplaba la referida rebaja.El portavoz de Alternativa Veciñal, Bernardo García, fue el primero en pedir que se dejara sobre la mesa la propuesta por el mismo motivo de que debería ser la próxima corporación la que tome esa decisión y recordó que su grupo había planteado una solución mediante una moción para poder modificar la ordenanza para el año próximo pero que el gobierno local no llevó a pleno. nLos tres grupos tacharon de "electoralista" la medida, al mismo tiempo que insistían en que condicionaría las cuentas de futuros ejercicios
económicos.
"Pódense tomar decisións a tres anos e eu tiña o compromiso de rebaixalo", contestaba el alcalde, quien puntualizada que con un superávit de 1,2 millones de euros y la reducción de la deuda, "a situación económica deste concello é envidiable".
El pleno también abordó las alegaciones presentadas por el PP a varias ordenanzas fiscales, tras la aprobación inicial de las mismas en un pleno anterior. Entre ellas, destaca la aplicación del 3% de descuento en los recibos domiciliados de la recogida de basura, al mismo tiempo que se rechazaba la alegación del IBI mediante la que se proponía una rebaja del 12%, pero para el próximo año.
