Se trata del servicio que presta ahora la empresa mixta Aquaourense para lo que se convocará un concurso público con el fin de que la nueva adjudicataria asuma las revisiones, mantenimiento y reparación de averías.
La comisión de control y seguimiento para el bombeo de Razamonde - San Trocado, integrada por representantes de los tres concellos que se benefician de la nueva captación del Miño: Cenlle, San Amaro y Punxín, y de la Diputación, ha decidido por unanimidad adjudicar el mantenimiento de las instalaciones. Se trata del servicio que presta ahora la empresa mixta Aquaourense para lo que se convocará un concurso público con el fin de que la nueva adjudicataria asuma las revisiones, mantenimiento y reparación de averías.
El grupo municipal Cambio Intelixente de Punxín ha sido invitado a formar parte de dicha comisión, a la vista del estudio que desarrolla su portavoz, Joaquín Moldes, desde hace dos años, encaminado a ofrecer un servicio de calidad a los usuarios y a un coste más bajo.
Concretamente, en Punxín, apuntó Moldes, que después de solucionar el problema del arsénico y de la escasez, con esta nueva captación, está trabajando con el gobierno municipal en acabar con las fugas de agua que están encareciendo el servicio al Concello. Señaló que ya han logrado un ahorro desde 2015, en que el coste era de 95.000 euros, a 82.000 en 2016, pero que hay constancia de numerosas fugas. Con el fin de localizarlas y repararlas, el Concello ha solicitado ayuda a la Diputación que para este año le concede 18.500 euros.
