O RIBEIRO

La escasa producción pone en peligro el pimiento de Arnoia

Cooperativa pemento Arnoia
photo_camera Instalaciones de la cooperativa San Salvador, que se encarga de comercializar el pimiento.

El Consello Regulador no funciona y la cooperativa está sin presidente porque opta a la alcaldía

La cooperativa San Salvador, que se encarga de la distribución y comercialización del pimiento de Arnoia, está en estos momentos en manos de una gestora después de que renunciara su anterior presidente, Rodrigo Aparicio Santamaría, para presentarse como candidato del PP a la alcaldía en las próximas elecciones municipales del 24 de mayo. Esta nueva situación viene a agravar más la crisis por la que atraviesa esta Indicación Geográfica Protegida Pemento da Arnoia, que se desataba hace aproximadamente un año cuando el mismo Aparicio Santamaría dimitía como presidente del Consello Regulador, descabezado y sin funcionar desde ese momento.

La gestora ha puesto en manos de asesores el estudio de las posibilidades que tiene la cooperativa para llevar a cabo una reestructuración y evitar una parálisis como la que sufrió entre el 2006 y el 2010 e incluso su desaparición.

Rodrigo Aparicio Santamaría asegura que uno de los principales problemas por lo que atraviesa tiene que ver con el número de socios, en total 120, que no coincide con la producción real, que está en manos tan solo 6 o 10 agricultores, dependiendo de la temporada. De esta forma, la gestora busca posibles soluciones para que la cooperativa la conformen únicamente los miembros que trabajen la tierra, compensando de algún modo la marcha de los restantes socios que pusieron capital hace años y que tienen derechos sobre la cooperativa.

SECCIÓN GENÉTICA

Al reducido número de productores, el gasto excesivo que generan las amplias instalaciones y a la parálisis del Consello Regulador hay que añadir también la selección genética de la simiente que está realizando el centro de la Xunta en Salceda de Casales, que fue uno de los motivos por los que la última cosecha se redujo a la mitad pasando de los 42.000 kilos de pimiento a 20.000. Según los miembros de la gestora, habrá que esperar probablemente otros tres años hasta conseguir una simiente auténtica y sin contaminación de otros pimientos que nada tienen que ver con los de Arnoia.

Sin embargo, las opiniones difieren en cuanto a la reestructuración de la cooperativa. Aunque Rodrigo Aparicio Santamaría considera que "as decisións, o lóxico é que as tomen os que producen e non a maioría do resto dos socios", uno de los agricultores Manuel Vázquez, piensa que todos ellos tienen unos derechos adquiridos y que deben continuar. Este vecino de Arnoia achaca la crisis a que la producción del pimiento "non é rendible, só é un complemento económico porque únicamente se produce en xuño, xullo, agosto e parte de setembro", y añade que "faría falta un precio máis xusto para que fose rendible, porque ademais da moito traballo".

Este socio afirma que este año ya no cultivará el pimiento porque ha encontrado otro trabajo, "sería necesario incentivar á xente con axudas, instalar invernadoiros e un precio máis xusto. Pode que así aumentara a producción para dar resposta a gran demanda que ten este pemento".

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