El fiscal exculpa al empleado de una pirotecnia que lanzó un cohete que provocó un incendio en Carballeda de Avia

La fiscal reclamó ayer el sobreseimiento de la causa penal abierta contra un empleado de la pirotecnia a la que se le encomendaron los fuegos artificiales de las fiestas patronales en Fiscas (Carballeda de Avia) en 2006. Un cohete provocó un incendio que calcinó 0,30 hectáreas. La Xunta, por su parte, sí interesó una pena de 10 meses de prisión.
El Juzgado de lo Penal número 2 de la ciudad fue escenario de dos juicios por sendos incendios forestales ocurridos en Carballeda de Avia y Viana por imprudencias graves. En uno de los casos, el inculpado fue un empleado de pirotecnia La Gallega, Manuel G.L. si bien en este proceso el Ministerio Fiscal interesó el sobre seimiento al entender que el asunto se debiera dirimir como sanción administrativa. La Xunta, por su parte, interesó una pena de 10 meses de prisión y una multa de 10 meses a razón de 30 euros al día.

Los hechos juzgadoS ocurrieron el 3 de junio de 2006 cuando una bomba de palenque lanzada con motivo de las fiestas patronales ocasionó un pequeño incendio en el paraje denominado ‘Fiscas’, en Carballeda de Avia, que afectó a 0,30 hectáreas de monte bajo y arbolado.

No obstante, la representante del Ministerio Público cree que no cabe hablar de una imprudencia en tanto que el lanzamiento de cohetes formaba parte de unas fiestas autorizadas por el Concello y que tuvo lugar en el lugar de costumbre pero que fueron determinantes las condiciones medioambientales (poca humedad y altas temperaturas) en la declaración del incendio.

Por su parte, Miguel R.V. aceptó una pena de seis meses de cár cel y una multa de seis meses (tres euros al día). Los hechos por los que fue juzgado ocurrieron el 14 de febrero del pasado año cuando el inculpado prendió fuego en una zona de pastizal en ‘O Sarillal’, en Viana do Bolo, amparándose en una comunicación para la quema de residuos agrícolas.

No obstante, según sostuvo la acusación a lo largo del proceso penal, el imputado no contó con la autorización administrativa adecuada y omitió las más elementales normas de cuidado, ya que ese día soplaba el viento, lo que deteminó que el fuego se propagase a 1,5 hectáreas de monte desarbolado.

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