El público disfrutó de una novedosa iniciativa en la que participaron cuatro agrupaciones de la banda

La gira nocturna de La Lira llenó los cafés de Ribadavia

Momento de la actuación del grupo de percusión durante la gira nocturna de la Banda de Música La Lira. (Foto: MARCOS ATRIO)
'Foi algo espectacular'. Así definía José Luis Tielas el resultado de la gira que la Banda de Música La Lira realizó por cuatro establecimientos hosteleros ribadavienses en la noche del pasado viernes. Tielas, director de la Banda de Música Infantil de La Lira, reconocía que antes de iniciar las actuaciones tenían miedo, 'había aviso de temporal, de ciclogénesis, e pensamos que a xente non sairía das casas, pero o que nos encontramos foi alucinante, pois todos los locais nos que toca encheronse e a xente en canto acababamos non lado, acompañaba á banda á seguinte actuación'.
El primer concierto tenía lugar a las 21,30 horas en el café 'O Meu'O Morto' y corría a cargo de los ocho componentes del grupo de percusión de la banda, que hizo un recorrido por la música contemporánea y acabó con ritmos tribales y latinos. El local llegó a llenarse y allí se dieron cita gente mayor, que siguen habitualmente las actuaciones de la Banda, con gente joven, atraída por la curiosidad, 'pero que se acabaron enganchando -señala José Luis Tielas- y muchos de ellos acudieron a las siguientes actuaciones.

La segunda parada tenía lugar en el café 'O Meu'. Los trece integrantes del grupo de clarinetes centraron su actuación en el jazz, seguida con expectación y numerosos aplausos por los asistentes.

Una hora después le tocaba el turno al 'Café de María', con la intervención del grupo de metales, compuesto por doce músicos, que interpretó música discotequera, 'que a xente aplaudíu a rabiar e como xa ocurrira nos dous cafés anteriores, tiveron que tocar máis pezas a maiores das previstas', explica José Luis Tielas.

La gira finalizó en el pub 'Aljama', que estaba 'petado, con moita xente que estaba nas actuacións anteriores e que cantaban e bailaban'. Este última actuación corrió a cargo de los ocho miembros del grupo de saxofones de la banda, que interpretaron ritmos latinos y piezas de rock y pop, de grupos como Queen y Deep Purple.

La iniciativa de La Lira finalizaba pasadas las 02.00 horas de la madrugada del sábado, una hora más tarde de la prevista inicialmente y que constituye un ejemplo del éxito logrado.

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