Técnicos de Patrimonio del Obispado de Ourense se trasladaron a la parroquia de San Lorenzo de A Pena, en el municipio de Cenlle, para comprobar el estado de deterioro del muro de piedra que separa la iglesia, del siglo XII, y la antigua casa rectoral, en ruinas.
El objetivo de la visita fue 'elaborar un informe para reparar los daños que presente este muro y una memoria económica de las obras necesarias, que serán trasladados a la comisión correspondiente', señalaron fuentes del Obispado.
Las grietas que presenta la estructura, de unos 20 metros de largo por dos de ancho y que formaba parte de la rectoral, amenazan con su derrumbamiento, que dejaría sin base el atrio de la iglesia, y un desnivel de 15 metros sobre la base de la rectoral.
Los feligreses de San Lorenzo habían remitido escritos al Obispado, Diputación y Concello de Cenlle, alertando del peligro que puede suponer la caída del muro y solicitando ayuda.
Los vecinos consideran que el derrumbamiento del muro podría causar daños graves en los cimientos de la iglesia y del atrio, además de dejar sin protección éste para las personas que acudan a los oficios litúrgicos o al cementerio colindante. El edificio de la rectoral, que aún hace 20 años ocupaba el párroco de San Lorenzo, fue destruido en el verano de 2005 por un incendio que quemó la práctica totalidad de la ladera boscosa que comunica el entorno de la iglesia con el núcleo de Cuñas y el Eixo do Ribeiro, tres kilómetros más abajo.
Las grietas que presenta la estructura, de unos 20 metros de largo por dos de ancho y que formaba parte de la rectoral, amenazan con su derrumbamiento, que dejaría sin base el atrio de la iglesia, y un desnivel de 15 metros sobre la base de la rectoral.
Los feligreses de San Lorenzo habían remitido escritos al Obispado, Diputación y Concello de Cenlle, alertando del peligro que puede suponer la caída del muro y solicitando ayuda.
Los vecinos consideran que el derrumbamiento del muro podría causar daños graves en los cimientos de la iglesia y del atrio, además de dejar sin protección éste para las personas que acudan a los oficios litúrgicos o al cementerio colindante. El edificio de la rectoral, que aún hace 20 años ocupaba el párroco de San Lorenzo, fue destruido en el verano de 2005 por un incendio que quemó la práctica totalidad de la ladera boscosa que comunica el entorno de la iglesia con el núcleo de Cuñas y el Eixo do Ribeiro, tres kilómetros más abajo.
