El fallo considera que "no resulta acreditado engaño con motivo de la actividad comercial".
La Audiencia de Ourense absolvió a Abdoulaye S. de estafar a un socio en un negocio de venta de coches de segunda mano en Senegal, fraguado en julio de 2012.
El fallo considera que "no resulta acreditado engaño con motivo de la actividad comercial". Esta última consistió en que el denunciante, en virtud de lo convenido, envió a Senegal 22 vehículos (19 fueron en barco y los tres restantes fueron trasladados por carretera). El importe de los vehículos dispuestos para su venta alcanzaba un importe de 117.847 euros.
La sala estima que cabe hablar de un contrato incumplido, pero no un contrato criminalizado, máxime ante los avatares contractuales del concierto negocial celebrado entre las partes y su falta de plasmación documentada. A juicios de los magistrados, la vía civil debe ser la adecuada "para la resolución del asunto enjuiciado".
