El alza de los materiales dejó 16 obras desiertas en Ourense por 2,6 millones

La industria de la construcción ha sido una de las más afectadas por el alza de los combustibles y las materias primas, y eso se ha traducido en un total de 16 obras públicas que quedaron desiertas el año pasado por un valor de 2,6 millones de euros. Estos son dos más que el ejercicio anterior, aunque el montante es un 51% inferior que en 2021, cuando ascendía a 5,3 millones. Así se desprende del informe del sector elaborado por la Asociación Provincial de Empresarios de la Construcción de Ourense, que deja claro que las administraciones locales fueron las más perjudicadas, ya que 14 de los 16 proyectos desiertos fueron municipales (destacando el caso de A Veiga, que no pudo ejecutar seis proyectos). La licitación de obra pública se estancó durante el inicio del año Entre enero de 2021 y septiembre de 2022, destacan los incrementos del precio de la energía (80%); el asfalto (61%); el aluminio (60%); los materiales siderúrgicos (57%); y cerámicos (52%). El resto de productos -químicos y plásticos, cemento, vidrio, madera y cobre- también sufrieron incrementos importantes. Si bien es cierto que la Administración adoptó mecanismos excepcionales, los constructores aseguran que fueron “insuficientes”, ya que solo el 3% de las obras pudieron acogerse a estas medidas. Licitación a la baja Sin obras de envergadura que tirasen de la licitación, el Estado redujo de forma drástica su inversión en la provincia (-81%) hasta los 43 millones de euros. Esta cifra contrasta con los cerca de 229 del año anterior, muy influida por las obras del AVE y las mejoras de la línea ferroviaria entre Ourense y Lugo. La administración autonómica también aminoró notablemente su actividad licitadora, con un descenso del 53,29 % y 52,4 millones de euros de inversión. Una acusada rebaja que se explica por los casi 53 millones de euros destinados por la Axencia Galega de Infraestruturas en 2021 para el Plan Director del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), además de otros 10 millones de la Consellería de Sanidade para la reforma de la unidad de cuidados intensivos. En 2022, el departamento de la Xunta de Galicia más activo fue la Consellería de Política Social e Xuventude, con 11,1 millones de euros. La administración local también participa del descenso general de la licitación pública. Una circunstancia que no suele encajar en un año preelectoral, cuando se disparan las inversiones, pero que también puede encontrar su explicación en la falta de recursos provocada por el alza de las materias primas. Tan solo 23 municipios incrementaron sus inversiones y 11 de ellos dejaron en blanco el capítulo de licitación. Así, en Ourense se licitaron obras por 141 millones de euros, un 64% menos que en 2021. Por contra, el inicio de 2023 (entre enero y mayo) refleja unos datos bien diferentes: las administraciones licitaron 159,7 millones de euros, lo que supone un 302,65 % más que en el mismo periodo del año anterior. Se debe a los 120 millones licitados para la estación intermodal. Empleo El empleo ofrece buenos datos para un sector muy necesitado de profesionales cualificados. 2022 cerró con 8.346 trabajadores y una media anual de 8.295 contratos. Con este incremento, la construcción supone ya el 8,33 % de todo el empleo generado en la provincia de Ourense. La ciudad de Ourense pide aprobar el PXOM y más termalismo