La iniciativa incluyó rutas entre los pazos, iglesias y espacios naturales
El Concello de Amoeiro vivió ayer una de sus múltiples "andainas", aunque en esta ocasión sin cronómetro para controlar los tiempos de los asistentes, árbitros para dar puntuaciones e incluso sin trofeos para los ganadores. El premio no fue otro que disfrutar de los encantos paisajísticos que ofrece el municipio y conocer toda la riqueza patrimonial, artística y cultural que ofrecen los emblemáticos pazos de San Damián, Coto Martín, Miranda, Campo, Santa Catalina, Poutás, Martinga y Trangiolas, así como las "casas grandes", como la de Otero Pedrayo.
Pero estas construcciones no fueron las únicas que pudieron visitar los múltiples asistentes, dado que las distintas rutas también incluían visitas por iglesias, espacios históricos y naturales e incluso vestigios arqueológicos como el Castro do Castelo de Alba de Búbal, la Pedra da Ferradura y la Lousa do Formigueiro. Esta última es, según dio a conocer el Concello, una singular piedra castrexa, que está situada en la frontal de la capilla do Formigueiro, y constituye en la actualidad el símbolo de la identidad de la Corporación municipal.
En la iniciativa, organizada en colaboración con Ourense +D de La Región, participaron numerosos vecinos y visitantes. La salida estaba prevista para las 10,00 horas en el Parque dos Sentidos, en el mismo Amoeiro, pero el recinto ya estaba lleno de personas desde más de una hora antes. El propio alcalde, Rafael Rodríguez, recordaba que el objetivo era que los asistentes compartieran conversación y experiencias al tiempo que disfrutaban de los encantos del municipio. La jornada, que contó con animación musical, concluyó pasado el mediodía con una comida de confraternización a base de bocadillos y empanadas.
