La aparición del covid disparó un 12% el gasto social de las entidades locales

El estallido de la pandemia del covid 19 a principios de marzo de 2020 obligó a todas las administraciones a variar su hoja de ruta para hacer frente a las tremendas consecuencias provocadas por el virus, visibles lógicamente en el ámbito sanitario pero también golpeando fuertemente la situación socioeconómica, con miles de empresas y familias pendiendo de un hilo por el confinamiento y las restricciones. El “escudo social” se hacía más necesario que nunca y, desde el nivel de la administración central, con todo el plan de ERTES o ayudas, el autonómico, con sus paquetes de ayudas, y el local se pusieron en marcha diferentes iniciativas para tratar de no dejar atrás a los más vulnerables. Así, el papel de los concellos y la Diputación, como entes más cercanos a los ciudadanos, también se pusieron las pilas y adaptaron su gestión, como refleja las cifras incluidas en las liquidaciones de los presupuestos correspondientes al 2020, el primer año covid. Los datos recopilados por el Ministerio de Hacienda (de 79 ayuntamientos y la Diputación, dado que 13 entidades locales no han cumplido todavía con su obligación de rendir cuentas) reflejan que el gasto destinado a actuaciones de protección y promoción social se disparó por encima del 12% en relación a los datos del ejercicio previo. Así, los proyectos ejecutados y las acciones desarrolladas supusieron un desembolso de más de 47 millones de euros. APUESTAS Con todo, atendiendo a los datos publicados por el Gobierno central, el comportamiento no fue homogéneo en todas las entidades locales, ya que cuatro consistorios (Os Blancos, Calvos de Randín, Cartelle y San Amaro) aparece en el apartado de “gastos en protección y promoción social” la cantidad de cero euros, mientras que hasta que en 11 concellos (Carballeda de Avia, Bande, Vilardevós, A Veiga, Castro Caldelas, Vilar de Santos, Punxín, Rairiz de Veiga, Viana do Bolo, Cualedro y Castrelo de Miño), el peso del área social está por encima del 25% del total de gastos realizados en el ejercicio, liderando el ranking Carballeda de Avia con más de un 38%. Por el contrario, hay siete municipios cuyas liquidaciones reflejan que la inversión en temas sociales no alcanzó ni siquiera el 4% de su presupuesto ejecutado. Son Beade, Boborás, Verea, Avión, Gomesende, Leiro y Pontedeva, este último con apenas 450 euros en este apartado. MÁS DINERO En términos absolutos, casi el 45% del gasto social efectuado por las entidades locales durante el pasado ejercicio correspondió a las partidas destinadas por Diputación y Concello de Ourense, que con 11,4 y 10,9 millones respectivamente, incrementaron un 89 y un 13% cada uno el presupuesto habilitado durante el año anterior, sin pandemia todavía condicionando todo. Reforzar servicios como la teleasistencia domiciliaria, habilitar espacios para los más necesitados o reforzar las ayudas fueron algunas de las acciones implementadas por los correspondientes gobiernos. CAMBIOS En el análisis general de todas las entidades locales, los datos publicados por el Ministerio de Hacienda reflejan que un total de 52 consistorios y la Diputación decidieron destinar más fondos al área social que en el ejercicio previo para así proteger a sus vecinos más necesitados. Verea, Cenlle, A Teixeira, Xunqueira de Espadanedo y Bande ejecutaron partidas que, al menos, duplicaban las de 2019. Barbadás, Sandiás, Trives, Petín y Monterrei presentaron, por su parte, ligeros incrementos, en cifras similares al año anterior. En 21 ayuntamientos, por su parte, la cantidad destinada a actuaciones de protección de los más vulnerables se redujo en comparación con la ejecutada en 2019. Las mayores caídas se dieron en Leiro, Quintela de Leirado, A Gudiña y Padrenda, con reducciones que oscilaron entre el 66% y el 31%, refleja el Ministerio de Hacienda a partir de los datos remitidos por estos consistorios.