Las escuelas infantiles de la provincia arrancaron ayer el curso, el primero de la gratuidad total que beneficia a más de 3.000 niños de 0 a 3 años en Ourense, según los datos de la Xunta. Una inversión de 5,7 millones permite que todos los matriculados de los 115 centros infantiles de Ourense (23 de titularidad privada y 3 de iniciativa social) vayan gratis a la guardería, tanto a la pública (las llamadas A Galiña Azul) como la privada. Hasta el curso pasado, la gratuidad afectaba solo a segundos hermanos.
Entre los más de 3.000 niños a los que afecta esta medida, cerca de 800 se matriculan en las escuelas infantiles de la red A Galiña Azul. El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, inauguró ayer el curso de los más pequeños en un centro de O Pino (A Coruña). Rueda destacó la “normalidad” en el regreso al aula en un curso en el que la gratuidad será “una medida pionera” y “para siempre”.
Ahorro de 2.000 euros
Las familias se ahorrarán una cantidad de entre 1.500 y 2.000 euros al año, en concepto del pago mensual de las plazas, con esta medida pionera de la gratuidad.
La conselleira de Política Social, Fabiola García, acudió también al centro donde subrayó el “esfuerzo” del gobierno autonómico para apostar por la gratuidad de todos los hijos, que en Galicia beneficia a un total de 30.000 familias y tendrá un coste de 50 millones de euros.
Rueda agradeció el trabajo de los miles de profesionales que inician el curso en toda Galicia “y dan soluciones a muchas familias que necesitan o desean que los niños estén desde hoy en las escuelas infantiles”.
Los datos de inscripciones en las escuelas infantiles de la provincia confirman los efectos positivos de la gratuidad total, independientemente de si se trata de una guardería pública o privada. Así, la lista de espera en las escuelas infantiles cayó este año a la mitad, precisamente en el curso que se estrena esta medida y que permite “aliviar” la sobredemanda en escuelas infantiles. Los datos de matrícula siguen la tendencia de otros años, con 811 niños en la pública, 57 menos. Una de cada tres plazas en las escuelas públicas queda vacante.
Los trabajadores de Galiña Azul inician huelgas pidiendo “estabilidade”
El curso en las escuelas infantiles arrancó a la par que las jornadas de huelga de los trabajadores del Consorcio Galego de Igualdade e Benestar, del que dependen las llamadas Galiña Azul, centros de días y residencias. Los empleados critican la “negativa” a negociar. Sus reivindicaciones tienen que ver con la petición de “estabilización” de sus puestos de trabajo. Con todo, la jornada en las guarderías ourensanas transcurrió con normalidad, ya que se garantizan los servicios mínimos.
El sindicato CNT lidera las manifestaciones y hoy hay convocados piquetes en la escuela infantil de Toén, mientras que mañana acudirán a la escuela de la rúa Colón de la ciudad y el jueves al centro intergeneracional de Mariñamansa.
Rosa Rairiz, trabajadora del Consorcio en Ourense, acudió ayer a las primeras manifestaciones celebradas en Santiago para reclamar la estabilidad del personal. “Estivemos en fraude de lei durante 15 anos. Na pandemia desdoblámonos nos centros de día e residencias para salvar vidas e agora, en lugar de negociar o proceso, non temos garantías de que vaiamos a conservar os nosos postos de traballo”, se queja. Esta trabajadora cree que la “calidade” de los cuidados se verá mermada en escuelas y residencias si la situación se mantiene así.
