CRÓNICA

Cuando los edificios se transforman en arte

Viaqua se ha propuesto acabar con el feísmo en los espacios urbanos que le tocan, empezando por la estación de bombeo a la altura de la desembocadura del Loña, que transformó en obra de arte al aire libre

Se acabaron los paisajes naturales entorpecidos por edificios de frías fachadas. Se han terminado, al menos, para la empresa Viaqua, que ha contratado a un reconocido artista urbano ourensano para integrar su estación de bombeo de captación de agua para la ciudad, por medio de murales de pinturas naturales que unifican el edificio y el paraje que lo rodea.

La estación, que capta el agua para Ourense, se ubica en la orilla del río Miño, a la altura de la desembocadura del río Loña, y ya se ha convertido en una obra de arte de 300 metros cuadrados, que el ourensano Mon Devane ha pintado para el disfrute de todos los que se animen a dar un paseo por esta zona.

La obra consiste en dos pinturas; una basada en la pesca fluvial y que representa a un pescador con su captura, y la segunda de las aves que pueden sobrevolar el espacio. Desde Viaqua explican que pretenden una actuación de "humanización y de compromiso con la integración paisajística de las instalaciones llevadas a cabo por la empresa", que "siempre procura mejorar el exterior y adaptarlo al entorno". Algo que, imaginan que va a tener continuidad en el futuro.

El reconocido artista ourensano utilizó para su obra la técnica del spray, con el que ha convertido el exterior de esta instalación en una agradable obra para disfrute de todos los ourensanos que habitualmente transitan por esta zona de paseo a orillas del río.

Devane ya ha participado anteriormente en la integración de otros edificios y espacios de la ciudad al entorno, como pueden ser el transformador de la empresa Fenosa, que se encuentra en la carretera de Oira, paredes en las piscinas públicas de esta zona, en el pabellón de deportes o en diferentes parques y áreas urbanas de Verín o el CPI Terras de Maside.

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