POLéMICA EN EL ENTROIDO DE OURENSE

La Audiencia Nacional decidirá el caso del joven disfrazado de ‘Alka-ETA'

Instrucción 3 se inhibió por si el caso pudiera ser enaltecimiento del terrorismo

El jueza titular de Instrucción 3, Eva Armesto, se inhibió a favor de la Audiencia Nacional en el caso del joven ourensano M.S.R., identificado y denunciado por la Policía Nacional durante el pasado Entroido por ir disfrazado de titiritero con una pancarta que rezaba "Gora-Alka.ETA", en alusión al caso de los actores madrileños que incluso fueron encarcelados durante unos días por representar una obra de títeres para niños en la que se exhibía ese cartel.

La magistrada no entra en el fondo del asunto y se limita a enviarlo a la Audiencia Nacional, órgano colegiado que instruye todos aquellos relacionados con delitos de terrorismo y sus formas. En este caso, la Policía Nacional confeccionó un atestado en el que se menciona un posible delito de enaltecimiento del terrorismo por la pancarta en cuestión.

El joven denunciado lo niega y sostiene que únicamente trató de disfrazarse de algo que ese momento estaba de actualidad, en el contexto de la sátira que rodea la fiesta del Entroido.

Será pues la Audiencia Nacional la que decida si archiva el caso o no a raíz de la inhibición del juzgado ourensano que estaba de guardia cuando ocurrieron los hechos.

La denuncia de la Policía Nacional se cursó, según sostiene, porque recibió varias llamadas en las que se les alertó de la presencia de un joven con un cartel que rezaba "Gora-Alka ETA" en la plaza Mayor de la ciudad. Varios agentes, entre siete y ocho, según el denunciado, acudieron a las 01.45 del día 9 a la plaza mayor, en donde estaba el joven en compañía de unos amigos ya que ese día había animación musical con motivo de la programación de carnaval en la ciudad.

M.S.R., de 29 años, tardó en percatarse de lo qué ocurría ya que cuando los policías se dirigieron hacia él incluso creyó que eran personas disfrazadas. La policía incluso identificó, aunque no denunció, a dos amigos y una tercera persona que se acercaron a la furgoneta policial para saber que estaba sucediendo.

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