Apenas registran matriculaciones y no han contratado el habitual personal de refuerzo de verano
Las autoescuelas de la provincia se encuentran en situación "límite", y podrían empezar a cerrar de continuar la línea iniciada en junio a raíz de la huelga de examinadores de la DGT. Están atravesando un julio y agosto "para olvidar" y parece difícil que llegue una solución a corto plazo. "Muchos propietarios estamos tirando de ahorros y ya hay al menos tres autoescuelas de Ourense en traspaso", asegura Laureano Bermejo, portavoz de las autoescuelas de la provincia y propietario de la Campus Francisco.
"La gente está echándose para atrás a la hora de hacer prácticas de conducir porque no hay un calendario de exámenes", señala Luis Novoa, gerente de Autoescuela Alonso, que destaca que "notamos que en julio y agosto casi no ha habido matriculaciones".
Fernando Varela, presidente de la asociación de autoescuelas y propietario de Autoescuela San Cristóbal, dice que las primera semanas de septiembre "suelen ser fuertes" pero, con la previsión de huelga indefinida, ahora temen lo peor. "Aún tengo 22 personas en cola para presentarse desde julio, a lo que hay que sumar las que ni siquiera lo han pedido", añade.
A la hora de analizar las consecuencias de la huelga, coinciden en señalar que se ha paralizado la contratación de refuerzo durante el verano. "Sempre contratabamos un profesor de reforzo no verán, ante o volume de traballo, e este ano quedamos os dous que estamos", señala Manuel González, propietario de Autoescuela Allariz.
"Solemos contratar gente en verano pero ahora es imposible", asegura Bermejo. En Autoescuela Alonso, Novoa señala que "somos cinco profesores y tres han cogido vacaciones, ante la falta de trabajo", cuando julio y agosto siempre fueron boyantes, "con casi el 60% de la facturación de todo el año".
El peso de los estudiantes
Otro de los aspectos que más notan, y que Bermejo remarca como factor característica de Ourense, es que "el que no se puede matricular ahora es un cliente que ya no va a volver, al contrario que en otras provincias". ¿La explicación? Que gran parte de los alumnos son preuniversitarios que aprovechan el verano para obtener el carné de antes de ir a otra ciudad a estudiar. "Esos acabarán examinándose en otra ciudad", asume Bermejo.
En Allariz notan esa misma situación pero con los emigrantes que regresan por vacaciones. "Todos os veráns teño catro ou cinco alumnos do País Vasco, e este ano non tiven ningún, e esa xente xa o sacará cando regrese á súa poboación habitual", afirma Manolo González.
El acuerdo entre la DGT y los examinadores no se ve muy próximos entre los empresarios consultados, que exigen soluciones de no producirse. Privatización, ayuda de cuerpos militares o el empleo de profesores de autoescuela con antigüedad contrastada son algunas de las propuestas.
Todos se declaran indefensos ante la situación. "Tanto los alumnos como nosotros somos los rehenes de esta situación", señala Bermejo. "Non podemos facer nada, só esperar a que os que mandan, cumpran", dice González. Tampoco ven que la más que probable imposición de servicios mínimos para la huelga indefinida prevista solucione mucho. "Nos obligaría a ser árbitros de un partido en el que no queremos participar", dice Bermejo.
