Los cuatro juzgados sociales de la provincia de Ourense tuvieron menos asuntos en 2022. No llegaron a los 4.000 que habían rebasado en 2021, un año que, según asegura José Luis Roig, letrado del Social 3, “hubo un gran volumen de demandas para solicitar a la Seguridad Social el complemento de maternidad en la pensión de jubilación por parte de los hombres”. Por este motivo, en ese periodo hubo 2.151 impugnaciones de resoluciones (apartado que incluye también otros supuestos) pero en 2022 ya bajaron a 1.629.
En 2021, hubo 416 despidos y 39 rescisiones de contrato judicializados frente a los 405 y 42, respectivamente, de 2022. En el año de la pandemia, sobrepasaron el medio millar (527) pese a la implementación del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). Y en años anteriores, aún más. “Muchos de los despidos no llegan a juicio porque hay una conciliación”, apostilla Roig. Sin embargo, en estos últimos meses, subieron reclamaciones de trabajadores con contratos temporales (Xunta o concellos) que piden el pase a indefinidos.
En estos órganos, un asunto no tarda más de mes y medio en llegar a juicio.
