Desde el 2013 se calcula que en Ourense se han enajenado 500 propiedades inmobiliarias que provienen de impagos
Las entidades financieras han aligerado los excedentes de propiedades inmobiliarias que pasaron a sus balances como consecuencia del impago de préstamos hipotecarios por parte de los clientes. La mayoría de las conocidas como viviendas de procedencia bancaria en la provincia están ya vendidas, según los datos que divulgan las propias entidades y la Sociedad de Gestión de Activos de Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).
En la actualidad pueden quedar en Ourense no más de 75 propiedades inmobiliarias a la venta, pero en los años duros de la crisis llegaron a acumularse hasta 500 propiedades de esta naturaleza, una cifra que se constató en el 2013. Por lo tanto, el descenso estimado ronda el 85% en apenas tres años.
En ese ejercicio, del medio millar de pisos, casas, naves, locales, oficinas o plazas de garaje a la venta en Ourense de procedencia bancaria, 225 fueron traspasados a la Sareb, que se había creado precisamente aquel año con el fin de retirar de los balances de las entidades financieras nacionalizadas las propiedades inmobiliarias que habían quedado en su poder por el impago de los préstamos hipotecarios.
En el mercado ourensano las entidades que acumulaban mayores propiedades fueron Novagalicia Banco (germen de Abanca), Bankia (sobre todo por operaciones suscritas por su predecesora, Caja Madrid) O Caixa Catalunya. Pero también los bancos Santander, Pastor o BBVA han ido soltando lastre inmobiliario a través de decenas de operaciones cerradas en los últimos ejercicios.
Para comercializar las propiedades tanto la Sareb como los bancos han llevado a cabo una política comercial muy agresiva, con descuentos medios que llegaron al 30%. Sin embargo, aún hoy alguna de las inmobiliarias adscritas a los bancos venden propiedades hasta un 75% por debajo del valor de salida, sobre todo si se trata de bienes de muy difícil comercialización. Es más, en algunos bienes a la venta en internet se invita al eventual comprador a que le ponga precio. Incluso el sector reconoce que "nueve de cada diez ventas se han hecho con precios a la baja sobre la tasación de salida".
Los compradores de este tipo de propiedades, además de poder adquirirlas a precios inferiores a los de mercado, han tenido la ventaja de contar con créditos hipotecarios suscritos por la entidad financiera que hace la venta. Tanto es así que un empresario del sector inmobiliario reconoce que "los últimos años los únicos créditos que han dado los bancos han sido para sus propias viviendas". Incluso añade que "la mayor parte de las ventas hechas han sido por los bancos, sobre todo las de segunda mano".
Diferentes tipos
Entre las propiedades que no han podido ser comercializadas en Ourense quedan aquellas cuyo valor es relativamente bajo. Las operaciones formalizadas en orden preferente han sido las viviendas nuevas en zonas de la capital o de A Valenzá, en el Concello de Barbadás, Pereiro de Aguiar (sobre vivienda unifamiliar), O Barco de Valdeorras, O Carballiño o Celanova. Entre lo queda por vender figuran pisos de cierta antigüedad, plazas de garaje, trasteros, locales comerciales, naves y solares sin edificar.
