El grupo bodeguero de Rueda José Pariente acaba de adquirir Vilerma, una de las bodegas que contribuyó al resurgimiento del Ribeiro a partir de la década de 1980 con la elaboración de vinos a partir de variedades autóctonas. La operación se formalizó el pasado jueves, pero fue este lunes cuando ha trascendido la noticia, tras la publicación de la misma en la edición digital de PlanetaVino, de Proensa.
Bodegas José Pariente es una empresa familiar que elabora vinos en Rueda, fundamentalmente blancos, a partir de las variedades verdego y sauvignon blanc. La transacción se produce tras varios años en los que se habló de la posible venta de la bodega ante la falta de relevo generacional.
Arsenio Paz
Vilerma nació como bodega en la segunda mitad de la década de 1980, de la mano del abogado Arsenio Paz, quien sacó su primera añada en 1987, una década después de haber adquirido la propiedad y realizar la recuperación de las variedades ancestrales con las que sustituyó las dominantes entonces en esta región vinícola: palomino y garnacha tintorera. Con seis hectáreas de viñedo, el blanco es el vino mayoritario, como en la bodega compradora. Pero a diferencia de la de Rueda en la que trabajan con monovarietales, Vilerma sigue la tradición histórica del Ribeiro en la elaboración de coupages de variedades autóctonas: Treixadura, albariño, godello, loureira, lado y torrotés en el blanco y brancellao, sousón, caíño tinto, ferrón y tempranillo en el tinto. Vilerma y Arsenio Paz constituyeron uno de los pilares de la consolidación del nuevo Ribeiro.
La nueva empresa propietaria, con tres generaciones de viticultores, asegura la continuidad de la filosofía con la que nació Vilerma de la mano de su fundador.
