La Confederación de Empresarios de Ourense también fue protagonista ayer por otra cuestión, la junta directiva, que se reunió por la tarde para evaluar el plan de integración de la alta velocidad en la ciudad que le presentó hace unos días el propio gobierno municipal.
Aunque el presidente de la patronal ourensana, Francisco Rodríguez, no quiso valorar ni detallar el contenido de la reunión y apeló a un diálogo con el Concello, asistentes consultados han precisado que mantienen su postura de apostar por una integración soterrada, porque garantiza una mejor permeabilidad y circulación entre barrios, y defienden cambios en la fórmula de accesibilidad a la futura estación intermodeal, al considerar que tal y como está concebida en el plan del Concello y del Ministerio de Fomento provocaría graves problemas de tráfico, colapso incluso, en el futuro.
Formalmente, la directiva de la CEO no se ha pronunciado con ese detalles, es más, ninguno de sus miembros consultados ha querido que trascienda su nombre, pero todos ellos apelan a una negociación con el gobierno local, tendente a que se realicen estas modificaciones; y si el Concello prefiere optar por sacar adelante su plan sin el diálogo que ellos proponen, sí harán públicas las conclusiones a las que han llegado y que aún matizarán en posteriores reuniones.
Estos miembros de la directiva consultados aseguran que no se les han dado argumentos técnicos que justifiquen la negativa al soterramiento pero, además, hacen hincapié en esos problemas de accesibilidad que se generarán, ya que a los autobuses discrecionales (por la intermodaldiad), se unirá un gran flujo de tráfico de viajeros del sur de Galicia que acudirán a Ourense a coger el AVE porque queda camino de Madrid y será más barato que hacerlo desde Vigo, por ejemplo, por no hablar de los vecinos de las 800 viviendas que se pretenden construir.
Diálogo
Precisaron empresarios consultados que ayer se analizó el proyecto del Concello y los planteamientos que defiende la patronal, manteniéndose las discrepancias por los problemas ya citados. Asimismo, rebaten el argumento municipal de que entrar a plantear el soterramiento y otro modelo de accesibilidad conllevaría retrasos en las obras, precisamente porque, aseguran, todavía no hay ni proyecto de estación ni por supuesto se ha comenzado actuación alguna en el casco urbano.Además, precisan, soterrar la entrada en la ciudad sólo supone cinco millones más de presupuesto, algo insignificante en lo que se refiere al presupuesto si a cambio, señalan, se construye una integración de alta velocidad adecuada para el futuro.
Miembros de la CEO, que también se muestra dispuesta a escuchar el planteamiento del PP, han recordado que cuando plantearon la variante del AVE desde Taboadela, para alejarla de la ciudad, también se les acusó de pretender retrasar la llegada de la alta velocidad y, sin embargo, ahora está asumido ese trazado y del AVE en ese tramo ni hay proyecto todavía.
La reunión de ayer siguió a la que mantuvo el comité ejecutivo hace 10 días, donde el Concello explicó su propuesta, y que entonces los empresarios consideraron como un 'avance'.
Formalmente, la directiva de la CEO no se ha pronunciado con ese detalles, es más, ninguno de sus miembros consultados ha querido que trascienda su nombre, pero todos ellos apelan a una negociación con el gobierno local, tendente a que se realicen estas modificaciones; y si el Concello prefiere optar por sacar adelante su plan sin el diálogo que ellos proponen, sí harán públicas las conclusiones a las que han llegado y que aún matizarán en posteriores reuniones.
Estos miembros de la directiva consultados aseguran que no se les han dado argumentos técnicos que justifiquen la negativa al soterramiento pero, además, hacen hincapié en esos problemas de accesibilidad que se generarán, ya que a los autobuses discrecionales (por la intermodaldiad), se unirá un gran flujo de tráfico de viajeros del sur de Galicia que acudirán a Ourense a coger el AVE porque queda camino de Madrid y será más barato que hacerlo desde Vigo, por ejemplo, por no hablar de los vecinos de las 800 viviendas que se pretenden construir.
Diálogo
Precisaron empresarios consultados que ayer se analizó el proyecto del Concello y los planteamientos que defiende la patronal, manteniéndose las discrepancias por los problemas ya citados. Asimismo, rebaten el argumento municipal de que entrar a plantear el soterramiento y otro modelo de accesibilidad conllevaría retrasos en las obras, precisamente porque, aseguran, todavía no hay ni proyecto de estación ni por supuesto se ha comenzado actuación alguna en el casco urbano.Además, precisan, soterrar la entrada en la ciudad sólo supone cinco millones más de presupuesto, algo insignificante en lo que se refiere al presupuesto si a cambio, señalan, se construye una integración de alta velocidad adecuada para el futuro.
Miembros de la CEO, que también se muestra dispuesta a escuchar el planteamiento del PP, han recordado que cuando plantearon la variante del AVE desde Taboadela, para alejarla de la ciudad, también se les acusó de pretender retrasar la llegada de la alta velocidad y, sin embargo, ahora está asumido ese trazado y del AVE en ese tramo ni hay proyecto todavía.
La reunión de ayer siguió a la que mantuvo el comité ejecutivo hace 10 días, donde el Concello explicó su propuesta, y que entonces los empresarios consideraron como un 'avance'.
