Entre los clásicos de la información está lo de la inversión pública en la provincia de Ourense y entre los clásicos está situarla entre las que menos reciben cada año. En esta ocasión hay un factor que cambia ligeramente la tendencia: la licitación de las obras de la estación intermodal, que inyectan más de 130 millones de euros a la estadística oficial. Es decir, de no ser por esta aportación nos mantendríamos en el pelotón de cola de toda España, lugar habitual de residencia de Ourense.
Hay obras prometidas hace un par de décadas y paralizadas sin explicación, otras que no avanzan o simplemente no arrancan, y también otras infraestructuras prometidas y que no se sabe nada de su suerte.
No hay que esperar reacción alguna a este hecho, porque nunca se ha producido y tampoco está claro que vaya a suceder ahora. Conviene saberlo a unos días de las elecciones para el Congreso de los Diputados y el Senado.
Hacia ambas instituciones se irán los representantes de la provincia a hacer lo que les mandan, que no tiene por qué coincidir con lo que Ourense espera o necesita.
