La titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Ourense ha condenado a Ana J.G. a pagar una multa de 300 euros por una falta de hurto ocurrida en abril de 2012.
La acusada accedió a la vivienda de la perjudicada, ubicada en la ciudad, con la finalidad de venderle unos perros y para realizarse un sortilegio para que su nieto no le hiciera daño.
Según la sentencia, la acusada, "abusando de la edad de la perjudicada y del miedo que sentía", le pidió que le entregara cosas de valor para que todo saliera bien, motivo por el que la mujer le entregó un anillo. La acusada lo metió en bolsas de plástico que después repartió por el domicilio y, cuando se fue, la mujer comprobó que su anillo no estaba. La sentencia, sin embargo, no considera probado que en el transcurso del sortilegio le hubiera sustraído, además del anillo, un colgante y una medalla de oro a la perjudicada. Tampoco que ésta le hubiera entregado 100 euros.
La magistrada sí ve probado que la acusada vendió parte del anillo de la mujer y la condena a indemnizarla con 113,27 euros. Además, entiende probado que el colgante y la medalla de oro que llevaba la acusada eran de su propiedad y comprada de forma lícita en una joyería, después de que declarase en el juzgado la responsable de la misma.
