"No pararé hasta transformar esta ciudad, lo sigo diciendo", señaló al final de su discurso el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, que ha decidido aferrarse al cargo pese a contar solo con el apoyo del concejal Armando Ojea. El regidor aseguró ayer que Ourense "se puede gobernar buscando pactos puntuales para proyectos", emplazando a la próxima semana para explicar "cómo se hará la labor".
Esas intenciones chocan, sin embargo, con una situación anómala en cualquier ciudad de las características de Ourense, con un gobierno, por el momento, de dos concejales de un total de 27, un escenario que es totalmente inviable para el resto de representantes políticos y que, en su opinión, solo contribuirá a acentuar la parálisis de una ciudad con una larga lista de tareas por delante y que ya vio como los gobiernos en minoría de PSOE y PP en los anteriores mandatos se encontraron con infinidad de contratiempos para sacar sus proyectos adelante, un problema que ahora se acentúa.
Opiniones
"La ciudad queda en una situación muy delicada. Me parece inviable que un ayuntamiento así salga adelante con solo dos personas que se hagan cargo", señala el portavoz del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, preocupado por la ciudadanía: "¿Qué le van a decir,por ejemplo, a los que están esperando por los servicios sociales?".
Entre los ediles de DO que se han desmarcado de Jácome, su portavoz, Miguel Caride, considera un "delirio" el planteamiento de Jácome para una ciudad de más de 100.000 habitantes. "Una ciudad no puede estar con una pareja de amigos, no tiene sentido ni lógica", apunta el exconcejal de Infraestructuras, preocupado por el futuro de Ourense: "Así no se puede gobernar, una concejalía exige mucho trabajo".
Tampoco el líder de Ciudadanos, José Araújo, ve visos de que Ourense avance con la situación actual y carga contra las intenciones de Jácome, culpando también al PP. "El disfruta sendo o centro do mundo porque nunca se imaxinou estar así. Regaláronlle un xoguete e agora ten a xoguetería enteira e está flipando", sostiene el portavoz de Ciudadanos en el Concello.
El plan de Jácome para seguir en la Alcaldía encuentra el rechazo también del BNG. "Pretender gobernar a terceira cidade de Galicia con un ou dous concelleiros e amparado en asesores non é gobernar, é secuestrar Ourense e impedir que avance, prospere e que saia da parálise na que se atopa", sostiene el líder local, Luis Seara.
Más críticas
La única fuerza de la Corporación que prefiere mantenerse por el momento en silencio es el PP, que tras exigir el martes a Gonzalo Pérez Jácome que saliese a dar explicaciones y este compareciese en público, elude pronunciarse sobre las manifestaciones del alcalde, pese a que este último disparó a todos los flancos.
Sí entran al barro el resto de partidos, poniendo también el foco en el comportamiento de los populares en todo este proceso. "Jácome decidió tirar de la manta y hablar de cómo fue utilizado y los intereses que están ahí detrás. Pero también es una irresponsabilidad de los concejales que han renunciado a sus competencias, han abandonado a la ciudadanía a su suerte. ¿Por qué no se van a sus casas", señala el portavoz del PSOE, que insiste en que su partido, como fuerza más votada en las elecciones, es "alternativa y ofrece diálogo a todos".
Mientras, el líder de Ciudadanos insiste, como en los últimos días, en que la "solución pasa por que PP e PSOE se poñan dacordo e aí nós axudaremos". El portavoz naranja pone especialmente el foco en los populares, "esperando que non se acovarden ante as ameazas" de Jácome.
De "meras escusas" tilda por su parte el BNG la rueda de prensa del alcalde ourensano, insistiendo en que es necesario que se frague una alternativa. "É preciso que partidos honestos, cunha folla de ruta clara e un proxecto de cidade sólido e solvente encabecen a rexeneración política en Ourense", afirma Luis Seara, que recuerda a Jácome que pese a erigirse en un luchador frente a la corrupción, "el é a expresión meses da propia corrupción", reprochándole no haber aclarado nada sobre la gestión económica de su partido.
Caride, el señalado
Si alguien centró las iras de Jácome fue su exportavoz, Miguel Caride, al que lanzó graves acusaciones como "traidor". El líder de los críticos de DO considera que las palabras del alcalde "son solo humo y una patada a seguir", recordando que en ningún momento ha podido rebatir con datos o informes las acusaciones de irregularidades en la gestión de los fondos que percibe el partido.
"Yo pensé que iba a comparecer para aclarar las graves acusaciones, pero para decir lo que ha dicho, mejor que no hubiese comparecido", señala Caride, poniendo como ejemplo que Jácome no desmintiese haber cometido alguna ilegalidad: "Ni lo negó y habla de que la pregunta es una impertinencia, me da la risa.
Para Caride, la rueda de prensa del alcalde demuestra que "es un buen telepredicador, que crea artificios y juegos florales para seguir riéndose de todos". El miembro de DO censura la "estrategia burda y dictatorial" de Jácome al frente del partido.
Las frases
RAFAEL R. VILLARINO (PSOE)
"Es inviable que un ayuntamiento así salga adelante con solo dos personas que se hagan cargo"
MIGUEL CARIDE (Críticos de DO)
"Humo y una patada a seguir. Una ciudad no puede estar con una pareja de amigos, no tiene sentido"
JOSÉ ARAÚJO (Ciudadanos)
"Regaláronlle un xoguete e agora ten a xoguetería enteira, disfruta sendo o centro do mundo"
LUIS SEARA (BNG)
"É secuestrar Ourense, impedir que avance, prospere e saia da parálise na que se atopa"
