La reunión que mantuvo el pasado lunes el portavoz socialista en el Concello de Ourense, Rafael Villarino, con Gonzalo Jácome, es motivo de crítica por parte de los críticos de Democracia Ourensana, que lo acusan de "incoherencia política". Los cuatro concejales, mayoría en el grupo municipal de DO, señalan que con una moción de censura puesta sobre la mesa y con una petición de dimisión hacia el alcalde, "no se puede entender que Villarino se preste a negociaciones en la trastienda de la Alcaldía, en un burdo pasteleo de declaraciones exclusivas y asesores a repartirse", expresan.
Los críticos reconocen su intención de conseguir una gobernabilidad en la ciudad "con una mayoría estable" en base al consenso. Por ello cuestionan la actitud de Villarino que "no hace más que trasladar a la ciudadanía una confusión innecesaria", mientras inciden en la búsqueda de una normalidad.
El grupo se reafirma en la voluntad de conseguir un acuerdo de mayoría "sin líneas rojas ni cordones políticos" y critican el veto hacia ellos que fueron "capaces" de denunciar lo que estaba sucediendo. Piden que no se antepongan "intereses partidistas antes que los generales" y señalan que de no ocurrir esto "se convertirán en cómplices necesarios del actual desgobierno" en el que se encuentra la ciudad con un alcalde que solo desea "mantenerse en el cargo".
