La Consellería de Cultura anunció ayer que la Plataforma de Contratación Pública de Galicia publicaba la propuesta de adjudicación de obras en la Catedral por importe de 50.000 euros a la restauradora Dolores Lago, a pesar de que el gabinete de prensa de la consellería aseguraba el martes que acababa ya de 'asinarse o contrato con ela'.
Dice que los trabajos constituirán la primera fase de la restauración en el Pórtico do Paraíso, relativas en este caso a las pinturas murales. El departamento autonómico aseguró además que esta intervención en el nártex está incluida en las que proyecta realizar en el templo ourensano y que cuentan con un presupuesto de 200.000 euros.
A pesar de este comunicado de prensa, los 50.000 euros que ahora se van a adjudicar y los 200.000 comprometidos por Cultura quedan muy por debajo de los 1,5 millones de euros de la inversión que en 2010 había anunciado para la Catedral el exconselleiro, Roberto Varela, para el periodo comprendido entre aquel año y 2013.
Un periodo en el que, al margen de la cantidad ahora asignada, la Xunta únicamente ha invertido 64.000 euros para corregir las entradas de agua que se estaban produciendo desde las cubiertas y que afectaban a la pilastra noroeste del crucero.
La Catedral de San Martiño registra desde hace años problemas de filtraciones de agua -especialmente, en la zona del deambulatorio del templo-, frescos deteriorados y, en menor medida, de maleza. Sin embargo, las inversiones comprometidas se han ido aplazando de forma sistemática y no han logrado paliar de forma contundente y definitiva estos problemas.
A pesar de este comunicado de prensa, los 50.000 euros que ahora se van a adjudicar y los 200.000 comprometidos por Cultura quedan muy por debajo de los 1,5 millones de euros de la inversión que en 2010 había anunciado para la Catedral el exconselleiro, Roberto Varela, para el periodo comprendido entre aquel año y 2013.
Un periodo en el que, al margen de la cantidad ahora asignada, la Xunta únicamente ha invertido 64.000 euros para corregir las entradas de agua que se estaban produciendo desde las cubiertas y que afectaban a la pilastra noroeste del crucero.
La Catedral de San Martiño registra desde hace años problemas de filtraciones de agua -especialmente, en la zona del deambulatorio del templo-, frescos deteriorados y, en menor medida, de maleza. Sin embargo, las inversiones comprometidas se han ido aplazando de forma sistemática y no han logrado paliar de forma contundente y definitiva estos problemas.
