Los familiares están consternados y pendientes de las noticias sobre Miguel Pizarro Barreiro
Miguel Pizarro Barreiro (37 años), uno de los seis españoles que permanecen desaparecidos en Nepal, después del terremoto del pasado 26 de abril, tiene sus raíces en la localidad de Nogueiroa, en Irixo, aunque reside en Zaragoza desde hace años. Sus familiares esperan con desesperación alguna noticia que ponga fin a la agónica incertidumbre de pensar que no lo van a recuperar. Uno de ellos, Lidia Trigás Damian, se refería a la angustia que están soportando desde que se produjo el terremoto. "Mi marido es primo hermano de su madre, que es de aquí, de Nogueiroa, y siempre hemos tenido una relación muy estrecha", apuntaba.
Ellos han estado en contacto directo con la hermana del desaparecido y las últimas noticias no han sido nada alentadoras, ya que el Gobierno ha dado por finalizada la búsqueda. "Me ha dicho que sólo queda un equipo forense para ver si pueden identificar los cuerpos que vayan apareciendo, y el miedo que tenemos ahora es que no los encuentren", señalaba Trigás.
Miguel Pizarro viajó a Nepal con su pareja, Isabel Ortiz, una experta montañera cántabra que también ha desaparecido. "Era la primera vez que hacían un viaje en avión para escalar. Siempre se quedaban cerca, pero hacía tiempo que tenían programado ese viaje. Quién iba a pensar que sucediese algo así", añadía ayer Lidia Trigás, que se enteró de que su primo era uno de los desaparecidos cuando vio a su hermana hablando en televisión.
La madre de Pizarro, Florinda Barreiro, se encuentra destrozada y no quiere hablar con nadie, así lo transmitía Juan Barreiro Castiñeira, vecino de Carballiño y tío abuelo de los dos hermanos. También sigue de cerca todo lo relacionado con los rescates, "muy preocupados y a la espera de noticias", indicaba. Todos ellos aseguran que la familia disfrutaba en ocasiones de las vacaciones en Irixo. "Es una persona formidable. No podía ser mejor", dice su prima de Nogueiroa.
