Drones: un mercado al alza en usos pero frenado por las restricciones


OURENSE (BARRIO DE COVADONGA). 12/02/2020. OURENSE. Búsqueda con drones de una mujer en el Barrio de Covadonga. FOTO: ÓSCAR PINAL
photo_camera Un policía escolta un dron, en Covadonga, en la búsqueda de una persona desaparecida en la ciudad. // Óscar Pinal
Un total de 33 operadores, públicos y privados, tienen licencia en la provincia gallega con más espacios para echarse a volar 

El uso de drones está al alza en Ourense, la provincia en la que menos restricciones y más facilidades hay para utilizar estas aeronaves  no tripuladas, y que cada vez cuentan con un mayor número de aplicaciones en ámbitos como las emergencias, la agricultura, la ingeniería, la topografía.... El sistema, todavía en una fase de desarrollo, cuenta con una combinación de operadores públicos y privados, que combinan la vigilancia y protección del entorno con nuevas aplicaciones para el día a día. 
El auge de empresas y operadores en este sector de aviones no tripulados en el último trienio ha sido espectacular, aunque la regulación del sector no acompaña el ritmo y frena algunos avances. En la actualidad, la provincia cuenta con 33 operadores autorizados por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) para realizar estos vuelos con drones, sumando empresas, particulares y agrupaciones de emergencias.

Zonas de limitaciones
"Ourense es la provincia con mayor facilidad para volar, es una gozada, en Barcelona te tienes que desplazar 40 kilómetros", indica el productor audiovisual  y piloto Marcos Conde, algo que confirma también Telmo López: "No tenemos aeropuerto y se nota". Solo está explícitamente prohibido el vuelo, según los datos de Enaire, cerca de los aeródromos y helipuertos de Beariz, Xurés, Laza y San Xoán de Río, así como en el área del parque natural de O Invernadoiro. 

La ausencia de aeropuerto reduce las limitaciones pero seguridad áerea es restrictiva, aunque el control no es excesivo

Tipos de actividades
Las actividades para las que están registrado su uso en la provincia oscilan desde operaciones de emergencia, búsqueda y salvamento,a fotografía y vídeo, labores de observación o  vigilancia aérea –como tienen Protección Civil de Maceda, el Consorcio Provincial de Incendios o la propia Diputación–, formación de pilotos o actividades de I+D... Entre ellas, hay empresas como Dendeoar, que muestran más de una veintena de actividades con drones, que aparte de las citadas, incluye publicidad aérea, tratamientos fitosanitarios, inspecciones lineales... 
"Se usa mucho en topografía, permite hacer imágenes en 3D del terreno, hacer ortofotos, detección especies invasoras o detectar crecimientos inusuales de distintas producciones agrícolas", explica Óscar Álvarez, que trabaja en Dendoar,  empresa de Celanova,donde lleva toda la parte de aplicación a la ingeniería. 

Ventajas
"Desde el punto de vista técnico, las grandes cualidades que tienen los drones son las de la capacidad de transportar gran cantidad de sensores, sus sistemas de posicionamientos (GPS) y su capacidad de control automático. Así, podemos obtener muchas capas de información perfectamente georreferenciada", añade Álvarez, que cree que esa información puede valer para elaborar "productos básicos" (véase fotos o vídeos) o ir más allá, "con valor añadido, para el desarrollo de soluciones". 
La Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Medio Rural, incorporó ya en 2019 drones para la lucha contra los incendios forestales, tanto para la vigilancia y la detección de incendiarios, como para la extinción y la invetigación de incendios. Ahora, dicen en Medio Rural, también se está usando "para vixiar o cumprimento das obrigas na xestión da biomasa" en zonas próximas a núcleos de población.

Al salvamento y el uso para fotografía y vídeo se añade el uso topográfico o la vigilancia de plantaciones agrícolas

Incendios y franjas
Medio Rural está habilitado como operadora de drones y cuenta con ocho agentes con titulación habilitada de piloto de dron y este año seguirá formando más. Las administraciones se están volcando, y en la provincia la Diputación de Ourense también está registrada como operadora de aviones no tripulados,  al igual que el Consorcio de Bomberos, que tiene una nunidad especializada de drones. El gobierno provincial fue pionero en España en la gestión de las emergencias con drones.
En el auge de los drones también tiene mucho que ver la parte académica, que tiene una pata en la provincia en el grado de Ingeniería Aeroespacial, y en el máster oficial en Operaciones e Ingeniería de Sistemas Aéreos no Tripulados , que va ya por su segundo curso. 
"Aún somos pocos, pero hay un gran índice de inserción laboral", indica Higinio González, profesor en Aeroespacial y coordinador del máster. 

Profesión con futuro
Según Randstad, controlador de tráfico de drones será una de las 10 profesiones más demandadas en 2030, al igual que los técnicos de drones. "El sector evolucionará a una mayor especialización, más como herramienta de trabajo que como algo recreativo", añade González, que cree que Ourense y la Galicia interior tienen una oportunidad para desarrollar tecnologías y equipos, que ahora llegan de Asia". 
Telmo López,  uno de los operadores registrados en la provincia, trabaja con Dendoar, y no ve tan claro que se pueda vivir solo de tener licencia. " Ser piloto no te garantiza un trabajo, te puede servir para aplicar a tu trabajo", dice López, que ya era ingeniero y se metió profesionalmente hace cinco años. 
El decano del Colegio de Ingenerios Técnicos de Telecomuniacioens de Galicia, el ourensano, José Manuel Martínez, pone el foco en el "problema de la legislación" que tiene en "satand-by"el sector  para el desarrollo de nuevas aplicaciones. "Desde el punto de vista de las telecomunicaciones, se puede avanzar, pero hay cosas que la norma no permite", apunta Martínez. Y pone como ejemplo aplicaciones como sulfatar las vides de las denominaciones de origen con drones, "lo que reduciría tiempo y costes", pero que la norma no permite.

El control y la norma
González resalta estar de acuerdo con la normativa: "Si fuera por las empresas no se regularía, pero rompo una lanza por AESA, en el tiempo que llevamos no ha habido accidentes, por algo será. La industria aeronáutica es muy conservadora, se prima la seguridad ante todo". Martínez señala que "cada vez se piden más licencias" y que la agencia empieza a "estar saturada". Esto, y la falta de vigilancia, hace que "cualquier día pase una desgracia". La presencia de "piratas", o aquellos que realizan los vuelos sin licencia, sigue siendo una constante. "Lo están notando sobre todo en foto y vídeo, que los precios están tirados, a nosotros, más orientados a ingeniería, menos", confirma López. 

Te puede interesar