El ourensano arrestado por presuntamente legalizar en la provincia coches robados en Portugal ingresó ayer en prisión tras declarar en el Juzgado. La Guardia Civil investiga si vendió cinco vehículos robados en Portugal a otros tantos ourensanos aprovechando la documentación de otros automóviles que sufrieron siniestros graves. El arrestado, Manuel Vizoso, es un ex policía que ya había sido detenido en 2005 por tráfico de drogas. Entonces, la Guardia Civil ya lo relacionaba con la importación de coches robados en Portugal.
El juez decretó ayer el ingreso en prisión de Manuel Vizoso, el único detenido hasta el momento dentro de la operación que mantienen abierta la Guardia Civil y la Guardia Nacional Republicana portuguesa para desarticular una red que robaba coches para legalizarlos y venderlos. La red aprovechaba la documentación de otros automóviles tras un sufrir un siniestro y ser enviados a un desguace.
El arrestado negó los hechos que se le imputan, aunque la Guardia Civil investiga si logró legalizar y vender a ciudadanos de Ourense cinco coches, entre ellos un BMW, un Mercedes y un Audi robados en Portugal, con la documentación de otros vehículos que no fueron dados de baja en la Jefatura de Tráfico tras sufrir un siniestro grave.
Los agentes también sospechan que Manuel Vizoso vendió, presuntamente, piezas de coches de alta gama robados en el país vecino a numerosos talleres de la provincia. La investigación es muy laboriosa, sobre todo si el vehículo robado fue desguazado y vendido pieza por pieza, dado que la mayoría de los talleres no llevan un control exhaustivo del material que adquieren y mucho menos de la numeración de cada pieza, afirmaron fuentes de la investigación.
El arrestado ingresó en la mañana en la cárcel de Pereiro de Aguiar como presunto autor de un delito de receptación de material robado. Según fuentes de la investigación, Manuel Vizoso es el último eslabón de una red perfectamente organizada que opera mayoritariamente robando vehículos cuando están estacionados en el norte de Portugal para, posteriormente, legalizarlos en otros lugares, con preferencia en localidades fronterizas, aseguraron.
Documentación de coches siniestrados
La Guardia Civil intervino durante un registro de la vivienda del arrestado documentación de vehículos que habían sido robados y de otros que fueron dados por siniestro total tras quedar convertidos en un amasijo de hierros tras un accidente. La red, según datos de la Guardia Civil, también logró legalizar coches a los que sus dueños plantaron intencionadamente fuego para cobrar el seguro.
Ayer, tanto el subdelegado del Gobierno, Camilo Ocampo, como los mandos del instituto armado declinaron valorar la operación, que podría desencadenar nuevas detenciones en los próximos días, mayoritariamente en las localidades fronterizas del país vecino.
Expulsado de la Policía por tráfico de drogas
El ourensano arrestado es un ex policía que fue expulsado del cuerpo de seguridad por delitos de narcotráfico. Sus compañeros lo detuvieron en 1984 por posesión de un kilo de hachís y en 1987 por 250 gramos de cocaína. Manuel Vizoso volvió a ser arrestado a principios de agosto del año 2005 dentro de una operación en la que los agentes intervinieron 990 gramos de heroína, 114 gramos de hachís, un rifle y 2.400 euros en metálico. En la operación, además del ex agente, fueron detenidas otras cuatro personas, que quedaron en libertad con cargos tras declarar en el Juzgado. Manuel Vizoso fue el único que ingresó en prisión, de la que salió al cabo de un año ya que no llegó a ser enjuiciado al quedar archivada la causa.
Aquel arresto se produjo cuando Manuel Vizoso regresaba de Taboadela. Los agentes intentaron pararlo, pero se dio a la fuga. Durante la persecución perdió el control del vehículo y volcó en la cuneta. La droga y el resto de material fue intervenido durante el registro del domicilio de los cinco arresta dos, que negaron entonces que fuera de su propiedad.
Entonces, las fuerzas de seguridad ya lo relacionaban e investigaban ante la sospecha de que importaba coches robados en Portugal.
La investigación llevó a la Guardia Civil a revisar todas las denuncias presentadas por robo de coches, sobre todo aquellas en que los agentes, tras abrir una investigación, descubrieron que eran falsas y que el dueño había simulado el delito de robo.
La investigación comenzó el pasado 30 de diciembre después de que un grupo de personas hallaran un coche modelo Audi totalmente carbonizado en un monte de Vilamarín. El vehículo no había sido dado de baja.
El arrestado negó los hechos que se le imputan, aunque la Guardia Civil investiga si logró legalizar y vender a ciudadanos de Ourense cinco coches, entre ellos un BMW, un Mercedes y un Audi robados en Portugal, con la documentación de otros vehículos que no fueron dados de baja en la Jefatura de Tráfico tras sufrir un siniestro grave.
Los agentes también sospechan que Manuel Vizoso vendió, presuntamente, piezas de coches de alta gama robados en el país vecino a numerosos talleres de la provincia. La investigación es muy laboriosa, sobre todo si el vehículo robado fue desguazado y vendido pieza por pieza, dado que la mayoría de los talleres no llevan un control exhaustivo del material que adquieren y mucho menos de la numeración de cada pieza, afirmaron fuentes de la investigación.
El arrestado ingresó en la mañana en la cárcel de Pereiro de Aguiar como presunto autor de un delito de receptación de material robado. Según fuentes de la investigación, Manuel Vizoso es el último eslabón de una red perfectamente organizada que opera mayoritariamente robando vehículos cuando están estacionados en el norte de Portugal para, posteriormente, legalizarlos en otros lugares, con preferencia en localidades fronterizas, aseguraron.
Documentación de coches siniestrados
La Guardia Civil intervino durante un registro de la vivienda del arrestado documentación de vehículos que habían sido robados y de otros que fueron dados por siniestro total tras quedar convertidos en un amasijo de hierros tras un accidente. La red, según datos de la Guardia Civil, también logró legalizar coches a los que sus dueños plantaron intencionadamente fuego para cobrar el seguro.
Ayer, tanto el subdelegado del Gobierno, Camilo Ocampo, como los mandos del instituto armado declinaron valorar la operación, que podría desencadenar nuevas detenciones en los próximos días, mayoritariamente en las localidades fronterizas del país vecino.
Expulsado de la Policía por tráfico de drogas
El ourensano arrestado es un ex policía que fue expulsado del cuerpo de seguridad por delitos de narcotráfico. Sus compañeros lo detuvieron en 1984 por posesión de un kilo de hachís y en 1987 por 250 gramos de cocaína. Manuel Vizoso volvió a ser arrestado a principios de agosto del año 2005 dentro de una operación en la que los agentes intervinieron 990 gramos de heroína, 114 gramos de hachís, un rifle y 2.400 euros en metálico. En la operación, además del ex agente, fueron detenidas otras cuatro personas, que quedaron en libertad con cargos tras declarar en el Juzgado. Manuel Vizoso fue el único que ingresó en prisión, de la que salió al cabo de un año ya que no llegó a ser enjuiciado al quedar archivada la causa.
Aquel arresto se produjo cuando Manuel Vizoso regresaba de Taboadela. Los agentes intentaron pararlo, pero se dio a la fuga. Durante la persecución perdió el control del vehículo y volcó en la cuneta. La droga y el resto de material fue intervenido durante el registro del domicilio de los cinco arresta dos, que negaron entonces que fuera de su propiedad.
Entonces, las fuerzas de seguridad ya lo relacionaban e investigaban ante la sospecha de que importaba coches robados en Portugal.
La investigación llevó a la Guardia Civil a revisar todas las denuncias presentadas por robo de coches, sobre todo aquellas en que los agentes, tras abrir una investigación, descubrieron que eran falsas y que el dueño había simulado el delito de robo.
La investigación comenzó el pasado 30 de diciembre después de que un grupo de personas hallaran un coche modelo Audi totalmente carbonizado en un monte de Vilamarín. El vehículo no había sido dado de baja.
