La Justicia ha echado abajo las licencias de los dos proyectos comerciales más largamente proyectados en la ciudad: Eroski, en A Farixa, e Hipercor, en Mariñamansa. Los fallos, basados principalmente en la nulidad del Plan Xeral de 2003 en el que se sustentaban, requiere volver a comenzar la tramitación para obtener el visto bueno a la urbanización -en el caso de Eroski también fue anulada- y las licencias propiamente dichas.
Ante esta situación, Eroski ha mostrado ya su intención de no dejar aparcado el proyecto y comenzar su tramitación, ajustando los documentos a la situación urbanística actual. De hecho, dado que el ámbito en el que se desarrollará se incluye en la ordenación urbanística provisional, mantiene las mismas características que el planeamiento anulado, por lo que desde el departamento de Urbanismo se espera que todos los trámites sean más ágiles que la primera vez, aunque no concretan posibilidad de plazos.
SITUACIÓN ECONÓMICA
Con todo, y aunque está previsto que se avance en esta cuestión en una próxima reunión, no sólo es la situación urbanística la que mantiene paralizado este proyecto, puesto que la crisis económica también dificulta su agilización. De hecho, Eroski decidió hace más de un año paralizar las obras de urbanización que había comenzado debido a que era el único miembro de la junta de compensación -junto a otro pequeño propietario- que había puesto dinero para el destierre. Así, reclamó al Concello que abonara su parte correspondiente -abonó 245.000 euros- pero la inestabilidad jurídica por la nulidad del Plan y la propia crisis económica han mantenido paralizados los trabajos.
Por su parte, Hipercor también prevé retomar los contactos con el Concello para comenzar la tramitación del proyecto, después de que tres sentencias -que aún no son firmes- hubieran anulado definitivamente su licencia, concedida días antes de que fuera definitiva la anulación del Plan Xeral de 2003.
Así las cosas, y aún teniendo en cuenta que la actual crisis económica ralentiza los grandes proyectos de estas características, ambas empresas han mostrado su intención de volver a iniciar los trámites para, en la medida de lo posible, retomar los proyectos de sus centros comerciales en la ciudad.
SITUACIÓN ECONÓMICA
Con todo, y aunque está previsto que se avance en esta cuestión en una próxima reunión, no sólo es la situación urbanística la que mantiene paralizado este proyecto, puesto que la crisis económica también dificulta su agilización. De hecho, Eroski decidió hace más de un año paralizar las obras de urbanización que había comenzado debido a que era el único miembro de la junta de compensación -junto a otro pequeño propietario- que había puesto dinero para el destierre. Así, reclamó al Concello que abonara su parte correspondiente -abonó 245.000 euros- pero la inestabilidad jurídica por la nulidad del Plan y la propia crisis económica han mantenido paralizados los trabajos.
Por su parte, Hipercor también prevé retomar los contactos con el Concello para comenzar la tramitación del proyecto, después de que tres sentencias -que aún no son firmes- hubieran anulado definitivamente su licencia, concedida días antes de que fuera definitiva la anulación del Plan Xeral de 2003.
Así las cosas, y aún teniendo en cuenta que la actual crisis económica ralentiza los grandes proyectos de estas características, ambas empresas han mostrado su intención de volver a iniciar los trámites para, en la medida de lo posible, retomar los proyectos de sus centros comerciales en la ciudad.
