La Concejalía de Urbanismo teme una avalancha de reclamaciones contra las calificaciones urbanísticas del planeamiento anulado, mientras el PP urge la presentación del nuevo documento

El final del PXOM de Cabezas amenaza la iniciativa privada

La ciudad se encuentra definitivamente sin plan urbanístico. (Foto: MARTIÑO PINAL)
El carpetazo definitivo al Plan de Urbanismo (PXOM) del exalcalde Manuel Cabezas carece de importancia real y efectiva para el actual grupo del PP, ahora en la oposición municipal. Lo importante es, dice el portavoz, Rosendo Fernández, mirar hacia delante y aprobar lo antes posible un nuevo planeamiento. Y en ese punto no ahorra críticas al gobierno municipal por lo que considera un excesivo retraso en la presentación del nuevo Plan, 'que parece el secreto mejor guardado' ya que, dice, hace dos años que fue encargado y no se conocen sus líneas maestras.
En realidad, el cierre del periplo judicial del Plan de Urbanismo del año 2003 no supondrá cambios inminentes en el urbanismo de la ciudad, enfrascado ahora en la redacción de ese nuevo planeamiento y en la ejecución de los proyectos desbloqueados a través de las ordenanzas provisionales aprobadas por la Xunta. Pero la última resolución del Supremo, que desiste de entrar en el fondo del asunto e incluso de dictaminar al respecto porque el Plan de Cabezas ya ratificó con anterioridad su anulación, y en varias ocasiones, convierte en 'definitivamente firme', precisó la concejala de Urbanismo, la desaparición de aquel modelo de gestión urbanística. Y ello, insistía Airea Soto, puede afectar de lleno al desarrollo de las áreas de reparto de la iniciativa privada -15 en total- autorizadas en la ordenación provisional de la Xunta, si se producen denuncias o reclamaciones. El argumento, señala, será cómo se puede desarrollar un determinado tipo de suelo, con una calificación urbanística que otorgó un planeamiento que ha sido anulado y, por tanto, no es legal.

No ocurrirá lo mismo, precisaba el jueves, con el desarrollo de las iniciativas, también incluidas en la ordenación, promovidas por el Concello. Aunque en este caso también se ejecutarán de acuerdo a un plan anulado, su consideración de proyectos que atienden al interés general los salvaguardan, al menos con mayor seguridad jurídica, de los pleitos.

Con todo, Urbanismo espera que para cuando se fallen definitivamente los pleitos que puedan iniciarse, ya esté en vigor el nuevo Plan, que pretende aprobar definitivamente al final del actual mandato municipal que acaba de empezar. Y el avance espera ponerlo a disposición de los ciudadanos a comienzos del año próximo, justo cuando el alcalde de la ciudad, Francisco Rodríguez, anunció la constitución de la comisión investigadora que depure responsabilidades sobre el cambio de planos (causa de una se las sentencias anulatorias del PXOM) en el año 2003.

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