En cuanto a los problemas de sequía que se pueden producir en los meses de verano por culpa de las escasas precipitaciones, Marín dice que no habrá que preocuparse puesto que los embalses de la zona, están al 80%
El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Marín, mantuvo ayer un intercambio de ideas con sus homólogos de la Cuenca Hidrográfica del Duero, la Agencia Catalana de Aguas y la Cuenca del Tíber (Italia). Durante este encuentro en Ourense, el presidente destacó que el 76% de las aguas de la cuenca gallega tiene "un estado excelente". El presidente puso de relieve que el objetivo hasta 2021, año en el que se hará la revisión de los planes hidrológicos, es "alcanzar hasta el 80% de aguas de calidad excelente".
En cuanto a los problemas de sequía que se pueden producir en los meses de verano por culpa de las escasas precipitaciones, Marín dice que no habrá que preocuparese puesto que los embalse de la zona, con las intensas lluvias del invierno, están al 80% de su capacidad y "a no ser que no llueva durante muchos meses, todo está en orden".
Este tipo de reuniones de intercambio de ideas está dentro del programa comunitario Peer Review, cuyo objetivo es poner en contacto las diferentes demarcaciones hidrográficas nacionales y de estados miembros de la UE. Este intercambio voluntario, asegura Marín, "sirvió para mirar y revisar los planes y adquirir conocimientos y experiencias de lo que se ha hecho en otras demarcaciones".
El secretario general de la Autoridad de la Cuenca del Tíber, Giorgio Cesari, resaltó las similitudes que el río italiano tiene con el Miño-Sil: "Tienen la misma morfología, se dan las mismas condiciones". Por su parte, Ignacio Rodríguez Muñoz, de la CH del Duero, alabó el plan de la cuenca Miño-Sil: "Es un plan muy sólido e incorporaremos cosas al nuestro"
