Una treintena de escolares de Gomesende y Quintela de Leirado que cursan sus estudios en el colegio de Educación Infantil y Primaria Rosalía de Castro de Gomesende estarán hasta mañana viernes sin clase debido al virulento incendio que durante la jornada del martes calcinó 47 hectáreas de monte que delimita ambos municipios.
El fuego, que no fue controlado hasta las 15.00 horas de ayer, afectó gravemente al complejo educativo de Moreiras, así como al polideportivo anexo. La alcaldesa, Pura Rodríguez Álvarez, relataba ayer los intensos momentos vividos en la tarde-noche del martes, 'menos mal que a esa hora los niños ya no estaban en el colegio', destacaba con el olor a quemado todavía en el cuerpo.
Tras una primera inspección visual en la zona, la regidora confirmaba los daños en el servicio de abastecimiento de agua del colegio al quedar dañada una de los tubos de la traída que pasan por el monte incendiado, además de los destrozos en la cubierta del pabellón y en la carpintería exterior de una de las fachadas del colegio. 'La cercanía con el pinar y las altas temperaturas que se alcanzaron en la zona, hizo estallar algún cristal, deshizo una veintena de persianas y parte del canalón del tejado', relataba Rodríguez, que ayer acompañó a los técnicos de Educación en la visita para inventariar los daños que ya están siendo reparados. 'Todavía es muy pronto para hablar de cifras', señalaba Rodríguez, que añadía que 'podríamos estar ante una desgracia mayor si no llega a ser por la rápida intervención de los bomberos de la Mancomunidad que lograron proteger la caldera del colegio'.
Tras una primera inspección visual en la zona, la regidora confirmaba los daños en el servicio de abastecimiento de agua del colegio al quedar dañada una de los tubos de la traída que pasan por el monte incendiado, además de los destrozos en la cubierta del pabellón y en la carpintería exterior de una de las fachadas del colegio. 'La cercanía con el pinar y las altas temperaturas que se alcanzaron en la zona, hizo estallar algún cristal, deshizo una veintena de persianas y parte del canalón del tejado', relataba Rodríguez, que ayer acompañó a los técnicos de Educación en la visita para inventariar los daños que ya están siendo reparados. 'Todavía es muy pronto para hablar de cifras', señalaba Rodríguez, que añadía que 'podríamos estar ante una desgracia mayor si no llega a ser por la rápida intervención de los bomberos de la Mancomunidad que lograron proteger la caldera del colegio'.
