La dirección del CHUO ha asegurado en un comunicado que la asistencia médica está "plenamente garantizada"
La gerencia de gestión integrada de los hospitales de Ourense, Verín y Barco de Valdeorras ha defendido la calidad asistencial, con una plantilla médica "dimensionada", a pesar de la alta demanda, que ha provocado el incremento de la actividad quirúrgica y atención de pacientes tanto urgentes como programados, en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO).
La dirección del CHUO ha asegurado en un comunicado que la asistencia está "plenamente garantizada, pese a la alta demanda asistencial que se viene registrado estos días, "derivada de la incidencia en la salud de la población del repunte de la onda de gripe".
Actualmente, el centro mantiene un "elevado" grado de ocupación, con 63 camas ocupadas en Neumología, cuando su media anual es de 20-22, o 278 pacientes ingresados en Medicina Interna, que tiene una media anual de 170-180.
Para hacer frente a esta situación, la gerencia ha resaltado el importante cuadro médico "formado por 30 especialistas", lo que supone "la ratio de internistas más alta de los hospitales del Sergas y, por tanto, perfectamente dimensionada para atender periodos de repunte de ingresos urgentes".
Con estas cifras, el Sergas considera que la media de pacientes atendidos por facultativo, es "óptima", con unos 12 a 14 ingresos por internista, "ratio que se esta manteniendo pese al incremento de ingresos".
Así, han atribuido a la coincidencia del repunte de gripe con el periodo vacacional y de libranzas de gran parte de los facultativos, una situación que se ha resuelto con su "reincorporación, para evitar la sobrecarga de trabajo de los internistas en activo".
Esta postura de la dirección se produce tras la concentración celebrada esta mañana por facultativos a las puertas de los servicios de urgencias de las instalaciones hospitalarias, donde criticaron la sobrecarga de trabajo por la "falta de previsión de la gerencia".
Esta acusación ha sido rechazada por la gerencia, que ha resaltado "la óptima utilización de recursos disponibles", "manteniendo la disponibilidad de camas y actividad quirúrgica", así como la reorganización de la programación de quirófanos, con el "aumento de la realización de intervenciones de cirugía menor", para "mantener el nivel de actividad", ha concluido.
