La Guardia Civil liberó en la madrugada a tres colombianas que se encontraban retenidas contra su voluntad en el interior del Club Cisne Azul de Albarellos, Verín. Tras avisar al servicio de emergencias 112, las mujeres fueron liberadas por los agentes que detuvieron al propietario del local, Antonio Augusto Pascual Neves, acusado de un supuesto delito de detención ilegal y amenaza de muerte con arma blanca. Las denunciantes declararon que el dueño del club les había cerrado la puerta impidiendo que saliesen.
Tres colombianas, vecinas de Zaragoza, Zamora y Canarias contactaron ayer con el servicio de emergencias 112 para avisar de que estaban siendo retenidas contra su voluntad en el interior del Club Cisne Azul de Albarellos, Verín.
Según confirmaron a los agentes de la Guardia Civil que las liberaron, el propietario del local, Antonio Augusto Pascual Neves, les impidió la salida del club cerrando la puerta del local.
M.Y.C.L (de 44 años), N.C.L. (de 39 años) y E.C.T. (de 30 años) lograron recluirse en una de las habitaciones del inmueble y desde allí, telefónicamente, lograron pedir ayuda al servicio de emergencias que contactó con la Guardia Civil.
Una patrulla de la Guardia Civil de Verín respondió a la llamada de aviso de las tres mujeres desplazándose hasta las instalaciones del Club Cisne Azul. Una vez en el lugar liberaron a las tres colombianas y detuvieron al propietario, de 52 años, nacido en Portugal pero vecino de Verín. Eran las 04.30 horas de la madrugada del domingo cuando los agentes del orden se llevaron a Pascual Neves.
Antonio Augusto Pascual Neves está imputado en un supuesto delito de detención ilegal y amenaza de muerte con arma blanca. Por el momento se espera que el detenido pase a disposición judicial.
Funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía, adscritos a la Brigada de Extranjería y Documentación de la Comisaría provincial de Ourense realizan periódicas inspecciones en el más de medio centenar de clubes de alterne que tiene censados en la provincia con el fin de mantener controles de extranjería y frenar la labor de redes de prostitución dedicadas al tráfico de mujeres. Verín es una de las zonas de la provincia, junto a Valdeorras, que más clubes de alterne aglutina. Estas operaciones se realizan por sorpresa, aunque en el caso de la pasada madrugada, respondió a una llamada de las tres mujeres que vieron cohartada su libertad cuando el propietario, Antonio Augusto Pascual Neves, impidió su salida cerrando con llave las puertas del local y amenazándolas de muerte si intentaban marcharse, según el relato que ellas mismas ofrecieron a los agentes de la Guardia Civil.
Según confirmaron a los agentes de la Guardia Civil que las liberaron, el propietario del local, Antonio Augusto Pascual Neves, les impidió la salida del club cerrando la puerta del local.
M.Y.C.L (de 44 años), N.C.L. (de 39 años) y E.C.T. (de 30 años) lograron recluirse en una de las habitaciones del inmueble y desde allí, telefónicamente, lograron pedir ayuda al servicio de emergencias que contactó con la Guardia Civil.
Una patrulla de la Guardia Civil de Verín respondió a la llamada de aviso de las tres mujeres desplazándose hasta las instalaciones del Club Cisne Azul. Una vez en el lugar liberaron a las tres colombianas y detuvieron al propietario, de 52 años, nacido en Portugal pero vecino de Verín. Eran las 04.30 horas de la madrugada del domingo cuando los agentes del orden se llevaron a Pascual Neves.
Antonio Augusto Pascual Neves está imputado en un supuesto delito de detención ilegal y amenaza de muerte con arma blanca. Por el momento se espera que el detenido pase a disposición judicial.
Funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía, adscritos a la Brigada de Extranjería y Documentación de la Comisaría provincial de Ourense realizan periódicas inspecciones en el más de medio centenar de clubes de alterne que tiene censados en la provincia con el fin de mantener controles de extranjería y frenar la labor de redes de prostitución dedicadas al tráfico de mujeres. Verín es una de las zonas de la provincia, junto a Valdeorras, que más clubes de alterne aglutina. Estas operaciones se realizan por sorpresa, aunque en el caso de la pasada madrugada, respondió a una llamada de las tres mujeres que vieron cohartada su libertad cuando el propietario, Antonio Augusto Pascual Neves, impidió su salida cerrando con llave las puertas del local y amenazándolas de muerte si intentaban marcharse, según el relato que ellas mismas ofrecieron a los agentes de la Guardia Civil.
