Montserrat Méndez evitó con su intervención decidida la muerte de una mujer de 70 años que estaba a punto de arrojarse al Miño desde el Puente Romano. Sin dudarlo, le echó la mano para que se agarrase a la vida.

La heroína del puente

Montserrat Méndez evitó que una mujer perdiera la vida arrojándose al río Miño (imagen de Telemiño). (Foto: MANSO)
Hay días difíciles de olvidar en los que uno pone a prueba la mejor versión de sí mismo ante personas anónimas que el azar coloca en el camino. En este caso, en un puente señero para los ourensanos. Días mágicos en los que un pequeño gesto se convierte en una gran gesta.
Montserrat Méndez acababa de dejar a su hijo en el colegio Salesianos de la ciudad a las tres y media de la tarde de ayer cuando vio a una mujer mayor (70 años) que se disponía a arrojarse al río Miño desde el Puente Romano. De hecho, ya había pasado los dos pies a través de los miradores habilitados en las cepas. La joven madre no se lo pensó dos veces y decidió intervenir de forma activa. Solidaria. La sujetó y habló con ella para evitar la tragedia, aunque, según reconoce, muy nerviosa.

La mujer encontró en sus palabras y preocupación una ínfima esperanza para seguir agarrada a la vida. 'La escuché que decía que se quería tirar, lo repitió varias veces, y la cogí enseguida por un brazo, pidiéndole a un señor que me ayudara a sostenerla', relata Méndez. Según añade, no pudo pasar por alto la escena. No podría haber sido de otra manera. 'No haberlo evitado me hubiera dado remordimiento de conciencia; eso se hace por cualquiera', aseguraba, restándole mérito a su intervención.

La mujer a la que salvó fue trasladada por un ambulancia asistencial al Complexo Hospitalario de Ourense, en donde quedó ingresada en la unidad de Agudos.

Las defunciones por suicidios aumentaron un 11,27 % en 2011 con respecto a 2010 en Galicia, que se sitúa como la cuarta comunidad con mayor número, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística a finales de febrero. En concreto, en 2011 se registraron en Galicia 29.879 fallecimientos, de los cuales 306 correspondieron a muertes violentas no accidentales (suicidios), 43 de ellos en Ourense. Un año antes se contabilizaron 64 casos, un cifra muy alta y que duplicó a los muertos en accidente de tráfico (34).

Te puede interesar