No se pudo encontrar el arma utilizada ni recuperar el dinero robado
Claudio F.G., de 41 años, se encuentra en prisión provisional en Pereiro de Aguiar. El hombre ingresó en la mañana de ayer en el centro penitenciario como presunto autor de dos delitos de robo con intimidación. Acumula 11 detenciones anteriores por diversos delitos, incluidos los robos.
Claudio F.G. prestó declaración en la tarde del pasado miércoles en el juzgado de guardia, pero fue reintegrado al calabozo de la Comisaría con el objetivo de que volviera a testificar durante la jornada de ayer, pero tras ser reconocido por las víctimas, una carnicera y un fisioterapeuta. Ambos, según pudo saber este periódico, lo reconocieron sin ningún género de duda. Los atracos se produjeron sobre las 20,30 horas del pasado viernes, aunque el presunto atracador no logró sustraer nada en el centro de fisioterapia. El dueño lo redujo después de que encañonara a su mujer para que le diera el dinero de la caja registradora.
En la carnicería hizo lo mismo y la dueña le entregó la recaudación, 400 euros.
Los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) lo detuvieron el pasado día 13 en un control en el centro de la ciudad, aunque entonces ya no tenía el arma de fuego encima. Aseguró a los agentes que la había arrojado al cauce del río Miño, pero sin especificar el lugar exacto. Tampoco fue recuperado el dinero sustraído en la carnicería.
