Las fiestas de A Ponte no contarán este año con las habituales barracas. El alcalde de la ciudad, Gonzalo Pérez Jácome, desoyó la propuesta de los feriantes de colocar atracciones y puestos en las calles pontinas y contratar con su dinero dos orquestas más para completar los festejos. En consecuencia, la programación queda reducida a dos conciertos (el de la orquesta Funçao Públika y el de María do Ceo) financiados por el Concello, a falta de una comisión.
Ángel Gutiérrez Cobos, presidente de la Confederación de Asociaciones de las ferias de España, y habitual de las fiestas del Santiago, fue el que inició el contacto con el gobierno municipal. “Les enviamos el proyecto de un ingeniero de cómo colocar los puestos en las calles y les dijimos que nosotros reuníamos dinero -ocho o nueve mil euros- para contratar orquesta el viernes y el domingo”, apunta. La propuesta incluía la donación de 500 fichas para las atracciones a familias en riesgo de exclusión social.
Pero la respuesta del Concello no fue la esperada por los feriantes. “El funcionario con el que hablé me dijo que bien, que solo quedaba atar flecos, pero a los tres días me envió un correo diciendo que no, que este año hacían lo que ya tenían pensado para las fiestas”, señala Gutiérrez. “No es que nosotros no comamos, es que toda la hostelería y el comercio sufre, son tres años seguidos sin nada. Estas eran unas fiestas muy importantes en la ciudad y a las que venía mucha gente”, recalca.
Por su parte, el Concello declinó ofrecer su versión sobre lo sucedido, al ser preguntado por este periódico. “Sin comentarios” fue la respuesta recibida desde el consistorio.
Los feriantes, a otra parte
La negativa del gobierno municipal ha provocado que los feriantes busquen ya otras fiestas del Santiago para trabajar, lo que sienta un antecedente de cara a las próximas. “Si la gente no viene un año y se busca otro sitio para estas fechas, luego es más difícil que en la próxima edición vuelvan aquí”, asegura Ángel Gutiérrez.
De cara al próximo año, Gutiérrez espera que se forme una comisión de fiestas que sea capaz de devolver a A Ponte la calidad de sus fiestas.
