Jesús Vázquez será también portavoz y Ana Morenza, la "superconcejala"

31/ene./19 - 08:27 Actualizado: 01/feb./19 - 00:52

La marcha de Araújo del Concello de Ourense provoca el tercer cambio forzoso en el gobierno local, que espera sustituto

El día a día municipal todavía se recupera del "shock" provocado por la salida del portavoz del grupo de gobierno y "superconcejal" José Araújo, la tercera salida de un concejal del PP en este mandato, y que provocará una reorganización del grupo municipal, con la teórica entrada del siguiente en la lista, Roberto Bermúdez, que todavía se encontraba ayer cavilando sobre la toma del acta.

Con la marcha de Araújo, que sopesa ahora la oferta que tiene de Ciudadanos sobre la mesa, toca cambio de funciones en el Concello. De momento, y a falta de algo menos de cuatro meses para las elecciones, el alcalde, Jesús Vázquez, asumirá las funciones de portavoz –después de que hayan pasado ya dos personas por ese cargo: Francisco González, que aguantó 42 días, y ahora Araújo–, mientras que Ana Fernández Morenza asumirá las carteras que quedan libres –infraestructuras y perímetro rural; servicio eléctrico; medio ambiente, parques y jardines; limpieza viaria y transporte público, que se llevan el 70% de los presupuestos del Concello–, manteniendo además Facenda y Contratación, las que gestiona actualmente.

"Mujer fuerte"

Con esta asunción de cargos, Morenza se convierte en la "mujer fuerte" del gobierno municipal y la que trabajará "mano a mano" con el alcalde. Este, por su parte, se quedará con el cargo de portavocía que hata ahora ocupaba el dimisionario Araújo, evitando así que los últimos cuatro meses de mandato pueda haber nuevas sorpresas.

Estos movimientos quedan a expensas de la llegada del sustituto, y que apunta a Roberto Bermúdez, presidente de honor de la Novas Xeracións y, a su vez, persona muy ligado a Araújo, al ser militante del mismo distrito, el de A Ponte.

Ahora, a los populares no les queda otra que "cerrar filas" y aguantar el chaparrón que caerá durante las próximas semanas, especialmente cuando se oficialice la probable candidatura de Araújo por Ciudadanos. De momento, ayer mismo el secretario de Organización de la formación naranja, Laureano Bermejo, volvía a lanzar un guiño en este sentido, ratificando la propuesta que le habían hecho al hasta hace dos días número dos del PP local. "La pelota está ahora en su tejado", afirmó con rotundidad Bermejo.

Mientras, el equipo de gobierno siguió trabajando con aparente normalidad. El propio alcalde, Jesús Vázquez, aseguraba que hubo una reunión con el equipo de Infraestructuras y de Medio Ambiente , hasta ahora liderado por el edil saliente, para preparar las mejoras que se prevén hacer en la ciudad. El objetivo es, sin duda, evitar que cunda una imagen de parálisis. El regidor reconoció ayer que "confiaba" en Araújo, era su "man dereita, o que tiña máis competencias". En todo caso, se volvió a mostrar "sorprendido" de que le comunicase la decisión "a só tres meses das eleccións", y no quiso ir más allá asegurando que "imos seguir traballando".

En la recta final del mandato se afrontan unos meses clave, que también lo serán para Jesús Vázquez a la hora de confeccionar las listas. Entre la militancia, los comentarios que circulaban ayer eran todavía optimistas, ya que se confía en que el actual regidor sea capa de armar "una lista con gente potente". Lo que parece claro a estas alturas es que no será la de Araújo la única ausencia en las próximas listas. Durante este mandato, uno de los concejales, Carlos Campos, actual concejal de Seguridad y Participación Ciudadano, ya amagó con su marcha hace un año, y todo apunta a que no repetiría. Junto a él, está por ver el futuro de otros ediles, como la de Cultura, Belén Iglesias, cuya gestión fue muy cuestionada a lo largo de este mandato.

Tres cambios forzosos

Con la marcha de Araújo, la corporación municipal afronta el tercer cambio en las filas del gobierno local. En los populares, el primer cambio llegaría con la dimisión de Francisco González Bouzán, apenas 42 días después de que Jesús Vázquez tomase posesión como alcalde, que provocó la irrupción en el escaño de Flora Moure. El abandono de González, por incompatibilidad con su cargo como director del Centro Cultural de la Diputación, convirtió a Araújo en la mano derecha del alcalde, sumando a sus concejalías el puesto de portavoz, el 17 de agosto de 2015.

Justo un año después, era la edila popular Isabel Castelo la que dejaba el equipo de gobierno por "cuestiones personales". Castelo llevaba termalismo, turismo y las áreas de Contratación y Facenda, que se repartieron Ana Morenza y Jorge Pumar. En su lugar, ocupó el escaño Carlos Campos.

Ahora, se acomete una tercera reestructuración forzosa que, si todo va como parece será la última antes del fin del mandato.

Solo el PSOE mantiene a los concejales que iniciaron el mandato

Los cambios de caras en la corporación municipal a lo largo de este mandato no han sido precisamente pocos. Solo el PSOE se ha mantenido ajeno al abandono de efectivos, algo a tener en cuenta, después del polémico mandato anterior en el que la bancada socialista había sufrido fuertes divisiones internas.

Aparte de los tres miembros del PP que abandonaron sus cargos y sus escaños, hubo otros tanos abandonos en la oposición, dos en Democracia Ourensana y uno en las filas de Ourense en Común. En abril de 2016, DO afrontaba la primera marcha de su grupo municipal. Así, la número tres, Ana Isabel Rebanales, dejaba el escaño aludiendo a "motivos personales", entrando en su lugar María del Mar Fernández Dibuja. Justo un año después, esa misma formación sufría la escapada de otro de sus miembros más activos, Pablo Prol, que fue sustituido por Telmo Manuel Ucha. En ese caso, el miembro que abandonó su escaño aludió a "motivos profesionales". En todo caso, a lo largo del mandato hubo otros movimientos, como la renuncia a la dedicación exclusiva del edil más "veterano" de la corporación, Domingo Castro. En un principio, también DO había mostrado su intención de que el edil Manuel Álvarez dejase de percibir esa dedicación íntegra, algo que finalmente no llegó a producirse.

En OUeC, sufrieron la baja de Ledicia Piñeiro, que dimitió en abril de 2018, también por "razóns laborais". En ese caso, se produjo el relevo natural, entrando en su lugar la número cuatro, Montserrat Valencia.