El inculpado asegura que se pelearon y llegaron a las manos tras una discusión por una herencia.
Antonio P. , acusado de intentar violar a su propia hermana, negó la intención sexual en su conducta. Reconoció que sí llegaron a las manos pero por distintos motivos. Según la versión de la víctima, peleó con denuedo con su hermano para intentar que no la penetrara cuando estaba encima de ella con el pantalón bajado. Pero, según el inculpado, forcejearon por una pelea relacionada con temas de herencia y reparto de fincas. El imputado, con dos condenas previas por delitos que atentan contra la libertad sexual, atribuyó la denuncia de la mujer, de 46 años, a una "venganza" que tiene su punto de origen en el reparto de fincas.
En el juicio, que se desarrolló a puerta cerrada en la Audiencia, la fiscal mantuvo la petición de pena de nueve años de cárcel , ya que tiene en cuenta la agravante de parentesco y el retraso mental que sufre la víctima (ligero), además de un trastorno psicótico y epilepsia. Por su parte, la letrada de la defensa planteó la libre absolución.
El inculpado cometió lo hechos el 27 de octubre de 2010 cuando disfrutaba de un permiso carcelario (del 20 al 27 de octubre de 2010) concedido por la prisión de Pereiro de Aguiar.
La mujer presentó denuncia el día 28 tras incorporarse a la residencia de Santa Cruz de Arrabaldo (Ourense) en donde vive y contar lo ocurrido a la directora y una psicóloga del centro.
La víctima mantuvo durante el juicio la versión de su denuncia. Según ella, su hermano la despertó en plena madrugada cuando pasaba unos días en casa de su madre. Luego, la requirió, con gritos e insultos, para que acudiera a una casa anexa porque había que meter tejas para evitar que las robasen. Según la mujer, su hermano estaba bebido y no logró su propósito, cuando la atacó, porque no consiguió la erección.
El Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) emitió un informe que acredita que el discurso de la mujer es coherente y creíble, sin capacidad de fabulación.
