El Juzgado de lo Penal 2 de Ourense acogió ayer la vista oral contra Juan R. A., de 50 años de edad, a quien el Ministerio Fiscal acusó de un delito de agresión sexual y de otro de allanamiento de morada, con una pena aparejada de dos años de prisión. El acusado negó su implicación en los hechos y su defensa solicitó la libre absolución.
Los hechos que se le imputan ocurrieron el 30 de enero de 2009, en torno a las 7.45 horas. El acusado admitió que a esa hora regresaba de salir de marcha, y tocó el timbre de la vivienda de su vecina, en la calle Chano Piñeiro. Cuando abrió, el le pidió que le sirviese una copa. Ella se negó y él se fue. Esto, según su versión.
La víctima relató que al abrir la puerta -pensaba que podía ser su marido, que acababa de salir hacia el trabajo-, el vecino se abalanzó sobre ella y comenzó 'a tocarme los pechos y a abrazarme'. La voces que dio alertaron a su madre, que dormía en la parte superior del dúplex. Su irrupción habría sido fundamental, ya que -según el relato de los testigos- en ese momento, al ver que aparecía una tercera persona, aflojó la presión que hacía sobre la mujer, y esto le permitió a la vecina empujarlo fuera de la casa y cerrar la puerta.
La víctima relató que al abrir la puerta -pensaba que podía ser su marido, que acababa de salir hacia el trabajo-, el vecino se abalanzó sobre ella y comenzó 'a tocarme los pechos y a abrazarme'. La voces que dio alertaron a su madre, que dormía en la parte superior del dúplex. Su irrupción habría sido fundamental, ya que -según el relato de los testigos- en ese momento, al ver que aparecía una tercera persona, aflojó la presión que hacía sobre la mujer, y esto le permitió a la vecina empujarlo fuera de la casa y cerrar la puerta.
