Los delitos contra la propiedad, especialmente los robos en viviendas, han constatado una escalada imparable que se desperezó en el primer trimestre de este año y, según recogen los últimos datos publicados por el Ministerio del Interior, se afianzó en el segundo.
Aún así, los responsables de las fuerzas de seguridad hablan de factores aleatorios, apelando a la cautela hasta que finalice el año.
Pero lo cierto es que la Guardia Civil y la Policía Nacional contabilizaron hasta junio -así lo recoge Interior- un total 77 robos con violencia e intimidación -atracos o tirones- y 692 con fuerza en las cosas (violentando bienes o propiedades), además de las 63 denuncias por sustracciones de vehículos a motor y 1.127 hurtos (apropiaciones indebidas en las que no media la fuerza ni la violencia). En total, en el primer semestre de este año hubo 1.959 sustracciones (una media de 11 al día), incluidas aquellas en las que se recurre a la intimidación de la víctima.
EN DOMICILIOS
Los datos más alarmantes, tanto por su entidad como por su importante repunte, son los robos cuyo lugar específico de comisión han sido las viviendas particulares. En este sentido, los amigos de lo ajeno asaltaron entre enero y junio de este año 213 domicilios (95 en el primer trimestre y 118 en el segundo), un 82% más que el año anterior, cuando se produjeron 117 asaltos en el primer semestre, teniendo en cuenta alguna posible variación en tanto que, según precisa el ministerio, se modificaron los criterios metodológicos para realizar el cómputo estadístico.
Los operadores judiciales, tanto jueces de instrucción como abogados, son los primeros en reconocer que detrás de alguno de estos robos están los dramas de la crisis y el desempleo. De hecho, este año se han visto varios casos en los que los detenidos , según comprobó el magistrado Antonio Piña, alegan en su descargo que 'roban para dar de comer a sus familias'.
No obstante, en la Guardia Civil y la Policía Nacional insisten en que la estadísticas trimestrales obedecen a circunstancias aleatorias, instando a un análisis más prolongado en el tiempo para poder valorar. En el caso del comisario de Policía, Ángel Barrera, puntualiza que no sólo hay que tener presente lo que se denuncia sino también lo que se resuelve y 'en esta comisaría el esclarecimiento de delitos es muy elevado'.
Pero no sólo los robos son díscolos con las estadísticas policiales Ourense fue la única provincia de toda Galicia en donde aumentó la delincuencia -un 5,4%- por segundo trimestre.
Pero lo cierto es que la Guardia Civil y la Policía Nacional contabilizaron hasta junio -así lo recoge Interior- un total 77 robos con violencia e intimidación -atracos o tirones- y 692 con fuerza en las cosas (violentando bienes o propiedades), además de las 63 denuncias por sustracciones de vehículos a motor y 1.127 hurtos (apropiaciones indebidas en las que no media la fuerza ni la violencia). En total, en el primer semestre de este año hubo 1.959 sustracciones (una media de 11 al día), incluidas aquellas en las que se recurre a la intimidación de la víctima.
EN DOMICILIOS
Los datos más alarmantes, tanto por su entidad como por su importante repunte, son los robos cuyo lugar específico de comisión han sido las viviendas particulares. En este sentido, los amigos de lo ajeno asaltaron entre enero y junio de este año 213 domicilios (95 en el primer trimestre y 118 en el segundo), un 82% más que el año anterior, cuando se produjeron 117 asaltos en el primer semestre, teniendo en cuenta alguna posible variación en tanto que, según precisa el ministerio, se modificaron los criterios metodológicos para realizar el cómputo estadístico.
Los operadores judiciales, tanto jueces de instrucción como abogados, son los primeros en reconocer que detrás de alguno de estos robos están los dramas de la crisis y el desempleo. De hecho, este año se han visto varios casos en los que los detenidos , según comprobó el magistrado Antonio Piña, alegan en su descargo que 'roban para dar de comer a sus familias'.
No obstante, en la Guardia Civil y la Policía Nacional insisten en que la estadísticas trimestrales obedecen a circunstancias aleatorias, instando a un análisis más prolongado en el tiempo para poder valorar. En el caso del comisario de Policía, Ángel Barrera, puntualiza que no sólo hay que tener presente lo que se denuncia sino también lo que se resuelve y 'en esta comisaría el esclarecimiento de delitos es muy elevado'.
Pero no sólo los robos son díscolos con las estadísticas policiales Ourense fue la única provincia de toda Galicia en donde aumentó la delincuencia -un 5,4%- por segundo trimestre.
