La Federación Limiar considera que el alcalde de Ourense debe mejorar la relación que mantiene con la asociaciones que representan a los barrios de la ciudad.
La Federación de asociaciones vecinales Limiar de Ourense reclama al alcalde, el socialista Francisco Rodríguez, avanzar más en el diálogo con los vecinos para mejorar su comunicación entre el Concello y los barrios, tras constatar que el regidor pasa olímpicamente de los problemas de la ciudad y que lleva meses sin recibir a muchos de sus dirigentes, según denunció el presidente de Limiar, Manuel Carnero.
El responsable vecinal fue ayer el encargado de poner encima de la mesa los problemas que a su juicio atraviesan muchos barrios de Ourense. Hay que recordarle que existen 45 asociaciones federadas en Limiar y cada una de ellas ha remitido al Concello una media de diez escritos, y casi todos quedan sin contestación, lamentó Carnero. Esto no puede continuar así, recordó. Para hacer frente a este silencio municipal, el dirigente vecinal propuso la convocatoria de una reunión por semana con el alcalde, además de la puesta en marcha de un boletín para registrar todas estas quejas y tener constancia así de lo que nos contestan y no, apuntó el dirigente vecinal. Por este motivo, el presidente de Limiar espera también la implicación de la Concejalía de Participación Cidadá que dirige María Devesa.
En este sentido, Manuel Carnero abogó por la creación de un Consejo Social en el que estarían integrados tanto el Concello como el resto de colectivos de la ciudad, y que sirva para conseguir una comunicación más activa por parte del alcalde, Francisco Rodríguez. También anticipó que estudian la posibilidad de organizar unas jornadas de seguridad ciudadana, con charlas de expertos de la Policía.
El responsable vecinal fue ayer el encargado de poner encima de la mesa los problemas que a su juicio atraviesan muchos barrios de Ourense. Hay que recordarle que existen 45 asociaciones federadas en Limiar y cada una de ellas ha remitido al Concello una media de diez escritos, y casi todos quedan sin contestación, lamentó Carnero. Esto no puede continuar así, recordó. Para hacer frente a este silencio municipal, el dirigente vecinal propuso la convocatoria de una reunión por semana con el alcalde, además de la puesta en marcha de un boletín para registrar todas estas quejas y tener constancia así de lo que nos contestan y no, apuntó el dirigente vecinal. Por este motivo, el presidente de Limiar espera también la implicación de la Concejalía de Participación Cidadá que dirige María Devesa.
En este sentido, Manuel Carnero abogó por la creación de un Consejo Social en el que estarían integrados tanto el Concello como el resto de colectivos de la ciudad, y que sirva para conseguir una comunicación más activa por parte del alcalde, Francisco Rodríguez. También anticipó que estudian la posibilidad de organizar unas jornadas de seguridad ciudadana, con charlas de expertos de la Policía.
