Tras más de 15 años de trámites administrativos sobre la integración urbana del AVE en Ourense, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) activó ayer definitivamente la variante exterior, que supondrá contar con la línea de alta velocidad entre la Meseta y la ciudad de As Burgas al completo una vez esté concluida, facilitando así el cambio de uso del corredor convencional. La actuación cuenta además con el soporte de los fondos Next Generation, que aporta la Unión Europea.
Adif sacó ayer a licitación los dos primeros subtramos de este recorrido de 17 kilómetros pendiente de ejecutar, en concreto la construcción de la plataforma entre Taboadela y Túnel de Rante y Túnel de Rante-Conexión Seixalbo, que suman un presupuesto de ejecución superior a los 127 millones y con plazos de obra de 34 y 28 meses, respectivamente. Estos concursos suponen la confirmación de la hoja de ruta que el organismo dependiente del Ministerio de Transportes ya había ido esbozando durante los últimos meses, primero con la publicación de las licitaciones en el Diario Oficial de la Unión Europea y, hace apenas tres semanas, con el concurso para contratar la consultoría de obras en uno de los tramos, una evidencia más de que la variante exterior no tenía marcha atrás. Tal y como avanzó este diario este fin de semana, de esta manera todo quedará preparado para que las obras puedan comenzar a principios del próximo año.
Taboadela-túnel de Rante
Este tramo tiene el presupuesto más elevado, de 97,3 millones para hacer realidad un recorrido de 5,6 kilómetros que dará continuidad a la línea que ahora finaliza en Taboadela y que debe desviarse con un ramal provisional al corredor convencional. La obra más importante de este tramo es el túnel de Rante, de más de 3,4 kilómetros, pero la necesidad de salvar las distintas carreteras hacen necesario hacer viaductos sobre los ríos Taboadela y Mesón de Calvos o el regato de San Benito.
Seixalbo
El trazado de la variante continuará hasta Seixalbo con una inversión de 29 millones para construir casi 2,3 kilómetros de plataforma, con un viaducto de 360 metros sobre el Barbaña y la N-5252 como actuación más significativa. A partir de ahí, la nueva línea se adosará casi en paralelo a la actual, facilitando su conexión para que entre en servicio mientras se ejecutan los tramos posteriores, los de mayor complejidad al atravesarse Montealegre y salvarse el Miño con un gran viaducto.
PSOE: "A obra máis importante da historia"
El PSOE celebró ayer la licitación de los primeros tramos de la variante ferroviaria, infraestructura que consideran “a obra máis importante da historia de Ourense”, atribuyendo además al Gobierno central socialista el impulso del proyecto, “logo de que o proxecto estivese paralizado, desprezado, postergado e vilipendiado polo executivo do PP de Rajoy, cunha Xunta silente e compracente ante aquela marxinación”.
Los socialistas ourensanos aseguran que desde 2012 a 2018, la tramitación de la variante cayó en el olvido, recortando las prestaciones.