La escritora leonesa Marifé Santiago lleva varios meses cosechando éxitos de crítica con la novela 'La canción de Ruth'. Este viernes, a las 20,15 horas, la presentará en el Liceo de Ourense, acompañada por la exministra Elena Espinosa.
¿Cuál es la canción de Ruth?
Es la de tantas personas y en concreto mujeres que en su vida llevan un secreto terrible que las circunstancias no les permiten revelar y eso produce un dolor provocado por una injusticia. Se trata de dar voz a todas esas mujeres silenciosas y silenciadas.
¿Somos más sufridoras las mujeres?
No es que seamos más sufridoras, sino que vivimos en una sociedad en la que no siempre somos artífices. Estas mujeres de las que hablo no tienen por qué ser nuestras antepasadas, sino que pueden ser nuestras compañeras.
¿Por qué recurre a la música como elemento central?
En 'La canción de Ruth' se juega mucho con las imágenes. El personaje de Ruth era una espigona de la Biblia, forma parte de la mitología hebrea. Para ella pensé, no en un libro, sino en una canción porque, aunque no siempre ocurra, la meta de un canto es siempre la de ser escuchado. Me pareció más amable hablar de él.
El escritor, en realidad, elige bastante poco, más bien es la historia la que le guía y tiene que dejarse llevar por el recorrido que marcan las palabras. 'La canción de Ruth' se desarrolla en la primera mitad del siglo XX, en una época convulsa de la que somos absolutos herederos. Los escenarios, a pesar de las distancias geográficas, presentan una misma cartografía del dolor. La onda expansiva de lo injusto contamina todo muy rápido. Aunque también podemos intentar darle la vuelta.
¿Significa que es algo inherente a la condición humana?
Aunque así lo sea, aunque decidiésemos que el egoísmo o el odio están asociados a la condición humana, no significa que no debamos luchar contra ello.
Su nombre está ligado al de la propia ciudad de Ourense.
(Cambia al gallego) Moi ligado. Cada un escolle o lugar do seu segundo nacemento. En Ourense vivín cinco anos, dando clase nos institutos As Lagoas e Ferro Couselo.
¿Le parece una ciudad inspiradora para escribir?
Para mí lo es muchísimo. Todo lo que he escrito, desde mi primer artículo, comienza ahí. Siempre he tenido la absoluta certeza de que no desarrollaría mi vocación hasta que no viviese en Galicia. Al final lo hice en una ciudad donde no esperaba y que por eso se convirtió en un regalo.
Es la de tantas personas y en concreto mujeres que en su vida llevan un secreto terrible que las circunstancias no les permiten revelar y eso produce un dolor provocado por una injusticia. Se trata de dar voz a todas esas mujeres silenciosas y silenciadas.
¿Somos más sufridoras las mujeres?
No es que seamos más sufridoras, sino que vivimos en una sociedad en la que no siempre somos artífices. Estas mujeres de las que hablo no tienen por qué ser nuestras antepasadas, sino que pueden ser nuestras compañeras.
¿Por qué recurre a la música como elemento central?
En 'La canción de Ruth' se juega mucho con las imágenes. El personaje de Ruth era una espigona de la Biblia, forma parte de la mitología hebrea. Para ella pensé, no en un libro, sino en una canción porque, aunque no siempre ocurra, la meta de un canto es siempre la de ser escuchado. Me pareció más amable hablar de él.
El escritor, en realidad, elige bastante poco, más bien es la historia la que le guía y tiene que dejarse llevar por el recorrido que marcan las palabras. 'La canción de Ruth' se desarrolla en la primera mitad del siglo XX, en una época convulsa de la que somos absolutos herederos. Los escenarios, a pesar de las distancias geográficas, presentan una misma cartografía del dolor. La onda expansiva de lo injusto contamina todo muy rápido. Aunque también podemos intentar darle la vuelta.
¿Significa que es algo inherente a la condición humana?
Aunque así lo sea, aunque decidiésemos que el egoísmo o el odio están asociados a la condición humana, no significa que no debamos luchar contra ello.
Su nombre está ligado al de la propia ciudad de Ourense.
(Cambia al gallego) Moi ligado. Cada un escolle o lugar do seu segundo nacemento. En Ourense vivín cinco anos, dando clase nos institutos As Lagoas e Ferro Couselo.
¿Le parece una ciudad inspiradora para escribir?
Para mí lo es muchísimo. Todo lo que he escrito, desde mi primer artículo, comienza ahí. Siempre he tenido la absoluta certeza de que no desarrollaría mi vocación hasta que no viviese en Galicia. Al final lo hice en una ciudad donde no esperaba y que por eso se convirtió en un regalo.
