Ofrecerá programas formativos durante todo el año y estará atendido por personal del Concello, con dirección de César Pichel
Acciones formativas sobre informática básica e internet, edición y montaje de vídeo, páginas web, ofimática y mecanismos a propósito de las charlas por videoconferencia, centran las primeras actividades del centro de nuevas tecnologías de La Molinera, que abre mañana, lunes, sus puertas para recibir las primeras inscripciones a los cursos programados, que comienzan ya el 4 de abril.
"Hay que destacar que la importancia de La Molinera, que es una fábrica de conocimiento", destacó el concejal de Servicios Generales y Promoción Económica de Ourense, Jorge Pumar. Por ello, señaló, "estableceremos una cronografía de actividades y actuaciones" que se prolongarán durante todo el año; y en las que intervendrán o coparticiparán otras administraciones. Es el caso de la Diputación, señaló, que organiza, con el Concello, una jornada en este centro de conocimiento sobre economía creativa, dentro del certamen ICC-Week, sobre industrias culturales. Será los días 13 y 14 de mayo.
Al margen de esta actividad y de la creación de talleres, que serán los que den pie a la apertura de diferentes aulas, el próximo 4 de abril comienza la primera actividad, un curso sobre lenguaje publicitario y publicidad ilícita. Tres días después comenzará otro sobre la seguridad de los datos en el móvil, y uno más en abril, entre el 11 y 15, sobre iniciación a la informática. En total, y sólo hasta finales de junio se han programado 14 cursos y talleres de diferentes temáticas, todas relacionadas con las nuevas tecnologías.
En La Molinera se ha instalado también el aula Cemit, que gestiona la Xunta y que estaba en la calle Progreso. Ello, además, permite ahorrar 31.714,92 euros (a razón de 1.989,44 euros al mes más la luz) que paga anualmente el Concello por el alquiler del local a una empresa; con lo que, resalta Pumar, se ahorra en alquileres de instalaciones municipales.
El centro conocimiento, que fue construido con fondos europeos por los anteriores gobiernos socialistas, costó 1,9 millones de euros. Llevaba más de un año cerrado pese a haberse finalizado las obras. En los últimos meses se desarrollaron labores de instalación de equipamientos y tecnología -almacenados desde hacía meses en el recinto-, cuando se descubrió la sustracción, todavía sin clarificar, de material tecnológico por importe de más de 20.000 euros (el precio que regía cuando fueron adquiridos, aunque el valor ya se ha devaluado).
El centro será atendido por personal propio del Concello, para lo que se está produciendo una reordenación en los departamentos del concejal, con objeto de dotar de funcionarios suficientes al nuevo centro de La Molinera; y lo dirigirá César Pichel, arquitecto pero también especializado en nuevas tecnologías.
