En la ciudad, más de un centenar de alumnos de varios colegios protagonizaron la tradicional lucha del xoves de comadres.
Ya no se puede parar. Con las comadres como teloneras de lujo, la provincia ya está lista para que el Entroido arrase con sus días de fiesta, comida, tradición, baile, desenfreno y sobre todo, con mucha deshinbición. La Praza Maior de Ourense fue ayer el escenario de la lucha ya histórica entre niñas y niños. En este "xoves de comadres", con el objetivo puesto en las codiciadas comadres, realizadas por los propios niños.
Alrededor de 140 alumnos de primero, segundo y tercero de Primaria de los colegios Amadeo Rodríguez, Manuel Sueiro, José G. García de Mende y el Divina Pastora, llenaron la plaza de color y de carreras llenas de nervios y de fuerza para evitar, los unos, perder sus comadres, e intentar, las otras, hacerse con ellas. Este tradicional xoves fue, además, amenizado por los profesores de música de la Escuela Municipal que, con teclado y clarinete, pusieron ritmo a las encarnizadas luchas.
Así que, ya subido el telón, todo está listo para disfrutar de pregones, desfiles, talleres, degustaciones, comidas, encuentros y mucho baile. El Entroido ya ha llegado. La calle está lista.
