El Sindicato Unificado de Policía (SUP) asumió la defensa de los cuatro agentes investigados en el marco de la operación Zamburiña contra el tráfico de drogas y la corrupción policial
El Sindicato Unificado de Policía (SUP) asumió la defensa de los cuatro agentes investigados en el marco de la operación Zamburiña contra el tráfico de drogas y la corrupción policial, puesta en marcha por la unidad de Asuntos Internos en febrero de este año y en la que fueron detenidos el jefe de la brigada de drogas de Ourense, A.R.F., y otro agente del grupo, F.M.A. El secretario general del SUP en Galicia es Roberto González, quien considera "despropor- cionada toda la instrucción".
La investigación parte de un es- crito anónimo que denunciaba el tráfico de armas en la Comisaría ourensana, ¿se han llevado muy lejos los pasos de esta operación?
Efectivamente. Consideramos que la unidad de Asuntos Internos se extralimitó en su investigación y dio credibilidad a la totalidad de los datos denunciados en el escrito anónimo del que partió la operación-sobre tráfico de armas en la Comisaría- sin investigarlos previamente. Esto perjudica a los cuatro compañeros imputados y a sus familias, así como a su honor si el juez los absuelve. No es justo que estos compañeros estén pasando por todo esto y estén siendo investigados por la desaparición de las armas.
Entonces la reivindicación del SUP es clara.
Clarísima. Pedimos que todo se acabe cuanto antes, que la instrucción goce de todas las garantías posibles, que se respete la presunción de inocencia entre los compañeros y se acredite que la actuación de éstos son daños colaterales. Que se esclarezca el robo de las seis pistolas desaparecidas, que es la fuente de la operación.
Los dos agentes detenidos han sido suspendidos de empleo y sueldo, previa sentencia judicial.
Efectivamente. Pensamos que la Dirección General de la Policía no respeta la presunción de inocencia de los agentes. Si el día de mañana quedan absueltos, ¿quién les pagara los daños que se le han ocasionados? En caso de tener que haber "castigo" debería ser posterior a una sentencia.
¿Se está castigando, de alguna forma, la eficiencia de la brigada?
Sí, era un grupo con muy buenos profesionales que aportaban mucha información para poner fin al tráfico de drogas en Ourense. Con el Código Penal en la mano, no es una buena praxis el hecho de tener confidentes, pero sería como creer en los Reyes Magos que un grupo con solo seis personas podría erradicar el narcotráfico sin "ayuda" externa. Y ya ha quedado demostrado que los agentes no participaron de ninguna manera en el tráfico de estupefacientes, porque sus domicilios fueron registrados y en ninguno se encontró nada raro. Hay que valorar el difícil trabajo de este grupo, que está pisando una línea muy fina entre lo lícito y lo ilícito, pero siempre en beneficio de todos. Lo que va a pasar a partir de ahora es que el nuevo grupo, a la hora de tratar con confidentes, será recelosa, y con razón, pero apelamos a que también son buenos profesionales.
Entonces, ¿la Comisaría está falta de medios?
Sí. En materia de personal estamos escasos. Si el grupo de drogas tuviese más agentes, todo esto no habría pasado porque no se hubiese recurrido a información externa. También reclamamos medios materiales, como los chalecos antibalas de protección individual, que debería ser una pieza clave del uniforme. Tampoco tenemos escudos balísticos ni armas no letales, que serían muy útiles en cuantiosas ocasiones para inmovilizar a personas. En cuanto a derechos, estamos negociando la jornada laboral
