El próximo viernes, a las tres de la madrugada, comienza el otoño y, según los expertos, será más seco y cálido de lo habitual. El delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Francisco Infante, aseguró ayer que, durante los meses de octubre, noviembre y diciembre, “hay probabilidad de que las temperaturas sean más altas de lo normal, con unas precipitaciones por debajo de lo habitual”.
De vital importancia son las lluvias que caigan durante esta estación para paliar el estado actual de sequía y de alerta por el consumo de agua. “Probablemente, se mantenga la tendencia de este verano; todo dependerá de cómo se comporten las precipitaciones este trimestre”, apuntó Infante, quien destacó el importante déficit de precipitaciones, que ya se sitúa en el 35%. “Debería llover un 30% más de lo habitual para salir de la sequía”, calculó, aunque precisó que, para aliviarla, llegaría con que en los meses de octubre y noviembre “lloviese lo normal”.
La provincia de Ourense batió el récord de temperatura máxima este verano, con los 44,1 grados centígrados registrados el pasado 14 de julio en la ciudad de As Burgas, en plena ola de calor, por lo que fue “el verano más cálido de la serie de datos desde que hay registros”, indicó. En cuanto a las temperaturas mínimas más bajas, destacó, como contraste, que los termómetros descendieron hasta 1,4 grados en Beariz el pasado 26 de junio. “Las mínimas fueron muy altas, muchas veces por encima de los 20 grados, lo que llamamos noches tropicales”, dijo.
Extremadamente cálido
Infante definió el periodo estival como “extremadamente cálido y ligeramente seco”. Si tenemos en cuenta lo sucedido cada mes, el delegado de la Aemet destacó los 13 días de tormentas en junio, y definió este mes como “húmedo”, julio como “muy seco”, y agosto como “seco”. En comparación con otros años, “desde 1961 julio fue el más cálido de la serie histórica”, mientras el mes de agosto fue “el segundo más cálido, después de agosto de 2003”, explicó. En cuanto al mes de septiembre, afirmó que “fue más cálido de lo normal” sobre todo, durante los primeros días.
Un frente dejará lluvia débil el fin de semana y empiezan a bajar las máximas
Un frente “no muy activo” llegará este viernes a la provincia, donde puede dejar “alguna lluvia el fin de semana, aunque no muy importante”, aseguró el delegado en Galicia de la Aemet, Francisco Infante. Además, durante la próxima semana, “el descenso de las temperaturas será más significativo”, añadió.
El sábado se esperan cielos con intervalos de nubes que pueden dejar algunos chubascos débiles y dispersos, con temperaturas en descenso, que dejarán máximas de 26 grados en Ourense y 24, en Verín. Ya el domingo, esta situación meteorológica intermedia entre altas y bajas presiones aumentará la probabilidad de lluvia intermitente y las temperaturas continuarán bajando. Se esperan 24 grados en Ourense y 22 en Verín.
