El pintor ourensano Antonio Quesada mantuvo esta semana una reunión con el alcalde de Vigo, Abel Caballero, en las dependencias de la Alcaldía viguesa, que acogen una exposición con sus obras, principalmente, paisajes de tendencia impresionista. Quesada afir mó sentirse contento con el emplazamiento elegido para sus pinturas. Asimismo, el artista nacido en 1932 aseguró que no está de acuerdo con las actuales tendencias de los pintores que emplean más tiempo en autopublicitarse que en pintar.
El pintor ourensano Antonio Quesada visitó esta semana el Concello de Vigo para contemplar el alcance de su exposición instalada en las dependencias de la Alcaldía viguesa.
Al principio concebí la idea de exponer en el Concello con cierto escepticismo, confesó el artista al alcalde Abel Caballero, aunque también afirmó darse cuenta ahora de que son unas dependencias muy concurridas todos los días por políticos, medios de comunicación y ciudadanos.
Los cuadros expuestos responden a su última etapa pictórica, comenzada en el año 2000, a raíz de los anhelos de Quesada por romper la estaticidad. En mi etapa anterior realizaba unos paisajes de mayor realismo, y en mi primera época hacía figura, comentó el pintor. También afirmó que el artista suele comenzar pintando de forma cercana a los cánones clásicos, no me gustaba desfigurar a una figura, bromeó Quesada, pero ésta es muy esclava, mientras que el paisaje te hace libre y cuando lo empiezas a deformar y a dejarte llevar parece que llegas a volar por el paisaje.
Sus obras muestran la huella de los colores de Zamora, donde el artista trasladó su residencia en 1953 para vivir junto a su mujer y cuatro hijos. Afirma que nada termina ya que una corriente de comienzos del pasado siglo sigue vigente hoy en día. Así, el primer lienzo de la exposición se trata de un amanecer en el que se funden los colores, en el que se crean diversos verdes por la unión que realiza el ojo humano del azules y amarillos. Es una obra que recuerda el estilo de Impresión, sol naciente de Monet. Pero esto no le preocupa, porque no hay que copiar a los grandes, hay que estudiarlos.
La labor artística necesita dedicación y mucho tiempo
El artista ourensano Antonio Quesada mostró durante su visita al Concello de Vigo su desacuerdo con la tendencia actual en el mundo del arte, en el que la gran mayoría de los pintores trabajan sólo una hora al día y dedican el resto del tiempo ha publicitarse y hacer marketing de sí mismos. Es trágico perder el tiempo en intentar contentar a unos y a otros, en vez de dedicar todas esas horas a la pintura.
Quesada afirmó además que la profesión de la pintura exige la dedicación de muchas horas diarias. La gente me suele decir que salgo poco. Algo difícil cuando eres pintor y además tienes una familia y otro trabajo que atender, ya que profesionalmente Quesada desempeñó diversos puestos laborales, llegando a ser secretario general de Hacienda en Vigo.
Asimismo, comentó que terminar un cuadro puede llevar perfectamente dos años, por lo que la labor artística necesita dedicación y mucho tiempo.
Confesó ser un pintor autodidacta, ya que nunca ha asistido a clases de pintura, sin embargo, afirma que es precioso aprender de alguien.
En este sentido recomienda a los jóvenes y nuevos creadores de Galicia que sean humildes y que dediquen muchas de sus horas al trabajo y al estudio de los grandes maestros de la pintura.
Por último, aseguró que nadie debe quedarse sólo en estas pautas ni imitar a los grandes artistas, sólo tomarlos como referencia.
Al principio concebí la idea de exponer en el Concello con cierto escepticismo, confesó el artista al alcalde Abel Caballero, aunque también afirmó darse cuenta ahora de que son unas dependencias muy concurridas todos los días por políticos, medios de comunicación y ciudadanos.
Los cuadros expuestos responden a su última etapa pictórica, comenzada en el año 2000, a raíz de los anhelos de Quesada por romper la estaticidad. En mi etapa anterior realizaba unos paisajes de mayor realismo, y en mi primera época hacía figura, comentó el pintor. También afirmó que el artista suele comenzar pintando de forma cercana a los cánones clásicos, no me gustaba desfigurar a una figura, bromeó Quesada, pero ésta es muy esclava, mientras que el paisaje te hace libre y cuando lo empiezas a deformar y a dejarte llevar parece que llegas a volar por el paisaje.
Sus obras muestran la huella de los colores de Zamora, donde el artista trasladó su residencia en 1953 para vivir junto a su mujer y cuatro hijos. Afirma que nada termina ya que una corriente de comienzos del pasado siglo sigue vigente hoy en día. Así, el primer lienzo de la exposición se trata de un amanecer en el que se funden los colores, en el que se crean diversos verdes por la unión que realiza el ojo humano del azules y amarillos. Es una obra que recuerda el estilo de Impresión, sol naciente de Monet. Pero esto no le preocupa, porque no hay que copiar a los grandes, hay que estudiarlos.
La labor artística necesita dedicación y mucho tiempo
El artista ourensano Antonio Quesada mostró durante su visita al Concello de Vigo su desacuerdo con la tendencia actual en el mundo del arte, en el que la gran mayoría de los pintores trabajan sólo una hora al día y dedican el resto del tiempo ha publicitarse y hacer marketing de sí mismos. Es trágico perder el tiempo en intentar contentar a unos y a otros, en vez de dedicar todas esas horas a la pintura.
Quesada afirmó además que la profesión de la pintura exige la dedicación de muchas horas diarias. La gente me suele decir que salgo poco. Algo difícil cuando eres pintor y además tienes una familia y otro trabajo que atender, ya que profesionalmente Quesada desempeñó diversos puestos laborales, llegando a ser secretario general de Hacienda en Vigo.
Asimismo, comentó que terminar un cuadro puede llevar perfectamente dos años, por lo que la labor artística necesita dedicación y mucho tiempo.
Confesó ser un pintor autodidacta, ya que nunca ha asistido a clases de pintura, sin embargo, afirma que es precioso aprender de alguien.
En este sentido recomienda a los jóvenes y nuevos creadores de Galicia que sean humildes y que dediquen muchas de sus horas al trabajo y al estudio de los grandes maestros de la pintura.
Por último, aseguró que nadie debe quedarse sólo en estas pautas ni imitar a los grandes artistas, sólo tomarlos como referencia.
