El retraso en la adjudicación del nuevo edificio de hospitalización del Plan Director del Complexo Hospitalario de Ourense, que servirá de soporte para los futuros planes de innovación tecnológica -Innova Saúde y Hospital 2050- que cuentan con financiación europea a través del Gobierno español (un 70% del coste, el 30% restante lo aporta la Xunta), preocupa a los profesionales de la sanidad ourensana pero también a los mismos responsables de la Consellería de Sanidade porque, si no se tramitan estas obras, se perderá la subvención que procede de Europa.
Fuentes del Servicio Galego de Saúde han reconocido que los plazos se agotan pero aseguran que antes de final de año se adjudicará el nuevo edificio, lo que permitirá mantener esas ayudas, que se conceden, no para la construcción del 'ladrillo' (que suma 48 millones de euros), sino para la dotación tecnológica posterior, para lo que están apalabrados otros 45,1 millones, de los que los fondos Feder aportan 36,1 millones.
El problema del Sergas es que no tiene dinero para iniciar el edificio de hospitalización y efectuar los primeros pagos, por lo que pretendía supeditar ese proceso a otro concurso, el de la gestión integral de espacios -la adjudicación del mantenimiento posterior de los servicios no sanitarios del CHUO-. Y ahí está el auténtico problema: el concurso abierto para la gestión del mantenimiento se declaró desierto porque no hubo empresas interesadas, ya que el pliego de condiciones impone a la adjudicataria la aportación de 14 millones de euros por adelantado para iniciar las obras del edificio de hospitalización que después gestionaría. El contrato es, con todo suculento, porque el Sergas ofrece el pago de 150 millones por 10 años, pero ese dinero que hay que aportar antes frenó las ofertas, hasta el punto de que el Sergas tuvo que abrir un procedimiento negociado (negociación directa con tres empresas del sector), que al parecer tiene una resolución compleja porque las condiciones de adjudicación son las mismas; plantear un cambio en ellas obligaría a abrir un nuevo proceso de concurso público, a la baja, y ya no hay tiempo.
Los médicos que se reunieron en asamblea el jueves para alertar del deterioro del CHUO recordaron, entre otros asuntos, la necesidad de ese nuevo edificio de hospitalización y el responsable del sindicato médico Cesm, Emilio Armada, que convocó la asamblea a petición de los facultativos, reconoció las dificultades que existen para adjudicar ese servicio de mantenimiento, clave para que se pueda iniciar el edificio de hospitalización, que el gerente de recursos humanos del Sergas, Pablo Torres, prometió en breve. Hace casi un mes anunció la adjudicación de la obra -para construir sí que se presentaron numerosas ofertas, 11- en 15 días. Pero pasó el tiempo y la adjudicación no se produce.
La contribución de fondos europeos servirá para incorporar, en el Hospital 2050, nuevos sistemas informáticos a Urgencias, probar de forma piloto una 'habitación inteligente', crear un pabellón de 'hospitalización experimental' y dotarlo de las herramientas adecuadas para desarrollar tecnología sanitaria punta. El segundo plan, Innova-Saúde, pretende, entre otras actuaciones, crear un sistema de diagnóstico asistido y mejorar la teleasistencia sanitaria. No son exclusivos para Ourense pero esta provincia los perderá si no hay obra en marcha este año, según reconoce el propio Sergas.
El problema del Sergas es que no tiene dinero para iniciar el edificio de hospitalización y efectuar los primeros pagos, por lo que pretendía supeditar ese proceso a otro concurso, el de la gestión integral de espacios -la adjudicación del mantenimiento posterior de los servicios no sanitarios del CHUO-. Y ahí está el auténtico problema: el concurso abierto para la gestión del mantenimiento se declaró desierto porque no hubo empresas interesadas, ya que el pliego de condiciones impone a la adjudicataria la aportación de 14 millones de euros por adelantado para iniciar las obras del edificio de hospitalización que después gestionaría. El contrato es, con todo suculento, porque el Sergas ofrece el pago de 150 millones por 10 años, pero ese dinero que hay que aportar antes frenó las ofertas, hasta el punto de que el Sergas tuvo que abrir un procedimiento negociado (negociación directa con tres empresas del sector), que al parecer tiene una resolución compleja porque las condiciones de adjudicación son las mismas; plantear un cambio en ellas obligaría a abrir un nuevo proceso de concurso público, a la baja, y ya no hay tiempo.
Los médicos que se reunieron en asamblea el jueves para alertar del deterioro del CHUO recordaron, entre otros asuntos, la necesidad de ese nuevo edificio de hospitalización y el responsable del sindicato médico Cesm, Emilio Armada, que convocó la asamblea a petición de los facultativos, reconoció las dificultades que existen para adjudicar ese servicio de mantenimiento, clave para que se pueda iniciar el edificio de hospitalización, que el gerente de recursos humanos del Sergas, Pablo Torres, prometió en breve. Hace casi un mes anunció la adjudicación de la obra -para construir sí que se presentaron numerosas ofertas, 11- en 15 días. Pero pasó el tiempo y la adjudicación no se produce.
La contribución de fondos europeos servirá para incorporar, en el Hospital 2050, nuevos sistemas informáticos a Urgencias, probar de forma piloto una 'habitación inteligente', crear un pabellón de 'hospitalización experimental' y dotarlo de las herramientas adecuadas para desarrollar tecnología sanitaria punta. El segundo plan, Innova-Saúde, pretende, entre otras actuaciones, crear un sistema de diagnóstico asistido y mejorar la teleasistencia sanitaria. No son exclusivos para Ourense pero esta provincia los perderá si no hay obra en marcha este año, según reconoce el propio Sergas.
