Un pescador muere ahogado tras resbalar en el río Miño

Ioan Jireghescu, un rumano de 59 años, trabajaba en una empresa maderera de Cortegada

Fallece un pescador ahogado en el río Miño, en Vilanova da Barca, en el término municipal de Cortegada. Ioan Jireghescu, de 59 años y natural de Rumanía, salió a pescar en la mañana del pasado domingo y no regresó a comer como se le esperaba, motivo por el cual la Guardia Civil del cuartel de Ribadavia recibía una denuncia alertando de su desaparición. Había quedado con su jefe para comer, que fue el primero que lo echó en falta y alertó a las fuerzas de seguridad.

En la primera inspección ocular que llevaron a cabo los agentes, descubrieron en las orillas del Miño, en un lugar próximo al antiguo balneario de Cortegada, diversos enseres personales, útiles de pesca y un teléfono móvil. 

Ante las fundadas sospechas de que podría estar en el río y dada la profundidad que tiene en ese entorno, ya que se trata del embalse de Frieira, fue necesario establecer un dispositivo de búsqueda que se movilizó durante la tarde del domingo y se prolongó en la mañana del lunes. 

Así, pasado el mediodía de ayer fue localizado el cuerpo sin vida por los buceadores del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil de A Coruña, en un entorno de difícil acceso con un vehículo.

Además de la Guardia Civil y los GEAS, también participaron en la búsqueda el Grupo de Emergencias Supramunicipal (GES) de Ribadavia y los voluntarios de Protección Civil de Cortegada, rastreando las orillas y entorno del río, hasta que finalmente se confirmaba la tragedia y los buceadores hallaban el cadáver.

Inmigrante

Ioan Jireghescu llevaba varios meses viviendo en Vilanova da Barca (su familia está en Rumanía), en donde trabajaba para una empresa maderera local, dedicada a la tala de árboles. Era muy aficionado a la pesca a la que le dedicaba parte de su tiempo libre, especialmente los domingos, según apuntaban algunos vecinos.

El cadáver fue depositado en el pantalán de Cortegada hasta donde lo trasladaron en una embarcación y allí permaneció hasta que personal judicial ordenó su levantamiento. La autopsia confirmará las causas de su fallecimiento, aunque todo apunta a un ahogamiento. Asimismo, las huellas en la orilla señalan que pudo haberse caído al agua al resbalar y que las botas de goma que llevaba puestas pudieron ser un impedimento para salir a la superficie. Los vecinos de Cortegada lamentaban el terrible accidente que costó la vida a este inmigrante.

Te puede interesar