Un pirómano mantuvo en vilo durante casi una hora a un equipo de extinción de incendios y a la Policía Local de Carballiño para sofocar el fuego provocado en poco menos de un cuarto de hora en seis contenedores de basura ubicados en cuatro calles distintas del casco urbano.
El aviso del 112 a las 10,40 horas de la noche del pasado martes ponía en alerta el dispositivo en la calle Monxardín, en donde se encontraron los primeros dos contenedores ardiendo. Aún no habían sido sofocadas las llamas, cuando ya se recibía la segunda llamada de un vecino de la avenida Julio Rodríguez Soto. Allí, el pirómano prendió fuego en el interior de un recipiente metálico. Después continúo su recorrido en la calle Calvo Sotelo, en donde carbonizó por completo un contenedor destinado al reciclaje de papel y cartón, rematando seguidamente en la avenida del Balneario, calcinando dos nuevos recipientes.
Un operario del grupo de emergencias (Grumir) y dos voluntarios de Protección Civil se encargaron de la labor de extinción utilizando un camión cisterna. Al respecto, señalaron que 'tivemos que ir de un foco a outro, según íbamos sofocando os lumes, así durante unhos 45 minutos, ata que estiveron todos apagados'. La Policía Local, que investiga la autoría de lo ocurrido, considera que dada la rapidez con que provocó los fuegos, el autor tuvo que desplazarse de una calle a otra en un vehículo a motor, seguramente un coche.
No es la primera vez que se incendian contenedores en Carballiño. Los agentes ya habían detenido el pasado verano y en noviembre a un presunto autor, que tras ser puesto a disposición judicial quedó en libertad con cargos.
Un operario del grupo de emergencias (Grumir) y dos voluntarios de Protección Civil se encargaron de la labor de extinción utilizando un camión cisterna. Al respecto, señalaron que 'tivemos que ir de un foco a outro, según íbamos sofocando os lumes, así durante unhos 45 minutos, ata que estiveron todos apagados'. La Policía Local, que investiga la autoría de lo ocurrido, considera que dada la rapidez con que provocó los fuegos, el autor tuvo que desplazarse de una calle a otra en un vehículo a motor, seguramente un coche.
No es la primera vez que se incendian contenedores en Carballiño. Los agentes ya habían detenido el pasado verano y en noviembre a un presunto autor, que tras ser puesto a disposición judicial quedó en libertad con cargos.
